Tras publicar estas cifras, la OIM hace un llamado a los gobiernos de la región para que aumenten la cooperación regional en aras a mejorar la seguridad de estos migrantes con independencia de su condición migratoria y en todas las instancias de sus viajes
Luna Perdomo – TalCual
Al menos 321 migrantes murieron o desaparecieron en rutas marítimas por el Caribe en 2022, una cifra récord, según los datos presentados este martes por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM); siendo esta la mayor cifra desde que comenzó el Proyecto Migrantes Desaparecidos en 2014. La cifra de venezolanos fue de 25.
Con respecto al 2021, la cifra supone un fuerte aumento con respecto a la de 2021, año en el que los fallecidos y desaparecidos en esas rutas ascendieron a 180.
Solo la mitad de los muertos y desaparecidos en 2022 pudieron ser identificados, señaló Patrice Quesada, coordinadora regional de la OIM para el Caribe, quien detalló que de este grupo 80 procedían de Haití, 69 de Cuba, 56 de República Dominicana y 25 de Venezuela.
Del total, 66 eran mujeres, 64 eran hombres, y 28 adolescentes de ambos sexos. Hay 163 fallecidos que no han podido ser identificados.
«La causa principal de muerte fueron los ahogamientos provocados por las malas condiciones climáticas que dificultan la navegación y el uso de embarcaciones precarias en malas condiciones o que no son aptas para la navegación en alta mar», explicó el organismo de Naciones Unidas en un comunicado.
Buena parte de los siniestros se produjeron en rutas hacia Estados Unidos, desde la República Dominicana a Puerto Rico, de Haití a República Dominicana y desde Venezuela a diversas islas del Caribe.
Tras publicar estas cifras, la OIM hace un llamado a los gobiernos de la región para que aumenten la cooperación regional en aras a mejorar la seguridad de estos migrantes con independencia de su condición migratoria y en todas las instancias de sus viajes.
«Las medidas para evitar las muertes de migrantes deben comenzar con vías migratorias regulares, defendiendo el derecho de las familias a permanecer unidas y respondiendo a las necesidades de los migrantes que se encuentran en situación de vulnerabilidad», afirmó la OIM.