Según un informe del Observatorio de Universidades (OBU), durante el mes de marzo, el 70% de las denuncias registradas corresponden a daños en la infraestructura física de las principales universidades venezolanas. Además, el OBU reveló que el 10% de las denuncias estaban relacionadas con problemas de seguridad en los campus universitarios, mientras que otro 10% se refería a la falta de servicios básicos como comedor, transporte y becas.
El informe también destacó que la autonomía universitaria se vio vulnerada en un 10% de las denuncias. En cuanto a las demandas específicas, durante marzo se registraron exigencias para la reactivación de los comedores en la Universidad Politécnica Territorial del Zulia, la Universidad del Zulia-Núcleo Costa Oriental del Lago y la Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt.
El OBU también señaló que durante el mes pasado se llevaron a cabo 5 protestas a nivel nacional lideradas por estudiantes en busca de la reivindicación de sus derechos estudiantiles. Estas demandas también se hicieron sentir en las redes sociales.
Sin embargo, el OBU denunció que el 52% de las publicaciones en las redes sociales del Ministerio de Educación Universitaria se dedican a efemérides y proselitismo político, dejando de lado las necesidades urgentes de los estudiantes. Esta situación pone de manifiesto la falta de atención hacia los problemas reales que enfrentan los estudiantes universitarios en Venezuela.
Es evidente que la infraestructura física de las universidades, la seguridad, los servicios básicos y la autonomía universitaria son aspectos fundamentales que deben ser abordados de manera prioritaria para garantizar una educación de calidad en el país. Los estudiantes merecen condiciones adecuadas para desarrollar sus estudios y alcanzar sus metas académicas. Es responsabilidad de las autoridades educativas tomar acción y atender estas demandas legítimas.