La cancillería del Gobierno de Nicolás Maduro manifestó este viernes que las sanciones impuestas por el Departamento del Tesoro a los diputados miembros de la directiva de Luis Parra buscan «interferir y socavar el buen funcionamiento de las instituciones democráticas del país».
Jhoan Meléndez./ ND
«Con la imposición de medidas arbitrarias en contra del presidente de la Asamblea Nacional, Luis Parra, electo el domingo 05 de enero de 2020, su directiva y otros diputados, todos integrantes de partidos de la oposición, el gobierno de Donald Trump pretende ocultar su manifiesto fracaso en su intento por imponer un cambio de gobierno por la fuerza y profundiza su intromisión en asuntos internos de Venezuela, al punto de inmiscuirse en asuntos exclusivos del parlamento venezolano, con la insólita intención de designar desde Washington las autoridades del poder legislativo venezolano», señalan en un comunicado.
Recordaron que las decisiones del parlamento «son soberanas y autónomas con respecto a los demás poderes públicos del Estado. La actuación de los parlamentarios y parlamentarias se enmarca en lo establecido en el artículo 201 de la Constitución que indica que son representantes del pueblo “no sujetos o sujetas a mandatos ni instrucciones, sino solo a su conciencia”».
«Estas gravísimas acciones unilaterales son contrarias al Derecho Internacional y atentan contra la estabilidad, la paz y la autodeterminación del pueblo venezolano», señala el escrito.
Por último enfatizaron su rechazo a lo que llaman «una nueva agresión estadounidense y reafirma que ninguna presión extranjera la desviará del camino de la independencia y el apego a la voluntad democrática soberana de sus ciudadanos y ciudadanas. Venezuela insta a toda la comunidad internacional a proteger los sagrados principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas y a condenar estos nuevos ataques contra su soberanía y sus instituciones democráticas».