Girot reiteró que la refinería El Palito, donde procede la gasolina destinada a Caracas, tiene «serios problemas» de confiabilidad
El dirigente de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv) Eudis Girot informó este lunes 14 de septiembre que los 60.000 barriles de gasolina, que el sábado llegaron a Carenero a través del tanquero «Beauty One», trajo a la capital combustible de 91 octanos «que viene a ser un pañito de agua tibia ante la grave situación presentada».
Entrevistado en Onda, Girot indicó que el carburante está en la planta de llenado de Guatire y que a partir de este lunes, comenzará a distribuirse lo obtenido en las estaciones de servicio de Caracas con alrededor de 270 gandolas de gasolina-
Recordó que la gasolina provino de la refinería de El Palito en el estado Carabobo, instalaciones que han intentado poner en funcionamiento de forma plena desde hace 75 días y que su reactivación ha registrado «problemas estructurales» por problemas internos que presenta en la planta de alquilación para generar el butano que se necesita en la mezcla para producir la gasolina necesaria.
Otros de los problemas registrados en El Palito son la falta de garantía y confiabilidad en los procesos de elaboración de gasolina debido a las fallas en los servicios industriales que se requieren como por ejemplo agua, electricidad, vapor y el tema tecnológico.
Dijo que existen «serios problemas» con los equipos rotativos, así como la obsolecencia de los equipos y los compresores. Indicó que la planta, paralizada desde 2016, se ha reiniciado 93 veces en 75 días. Denunció también que el dinero destinado para su mantenimiento preventivo y correctivo fue robado, por lo que las instalaciones han entrado en obsolecencia. Además, el «canibalismo» que se registra en sus instalaciones perjudica también la operatividad de la misma.
En ese sentido, explicó que con el «estrés» que sufren las tuberías con tantos encendidos de la planta, el deterioro se acelera y advierte entonces que la operatividad de la planta representa un «serio peligro para los trabajadores y comunidades aledañas».
«Hay mucho desorden operacional, ineficiencia, incapacidad y falta de liderazgo», expresó.
A su juicio, el plan esgrimido por el Ejecutivo nacional para producir gasolina en el país ha fracasado porque las refinerías del país, la ubicada en Anzoátegui, la de El Palito y las del Complejo Refinador Paraguaná (CRP), están sin operar desde 2016 y no producen gasolina.
Respecto a Amuay -que junto a Cardón forman parte del CRP- se estaba produciendo 27.000 barriles de gasolina «y por desespero de intentar subir la producción a 40.000 barriles», las instalaciones quedaron fuera de servicio por 45 días, por lo que ahora solo Venezuela depende de El Palito para su suministro de gasolina.