Casi nadie duda que veremos cambios en la política de Estados Unidos hacia Venezuela con la llegada a la presidencia de Joe Biden, pero a qué velocidad se producirán o la envergadura de estos dependerá del contexto político venezolano y de la capacidad de los interlocutores para alcanzar un acuerdo a través del diálogo, dijeron expertos consultados por la Voz de América.
Y es que la crisis sin precedentes que atraviesa Venezuela aviva múltiples expectativas con la llegada a la Casa Blanca del presidente demócrata, Joe Biden.
¿Prevalecerá la diplomacia? ¿Deberían o no ser levantadas las sanciones? ¿Es posible un diálogo político?
Analistas sostienen que Venezuela no debe esperar un levantamiento inmediato e incondicional de las sanciones que hereda Biden de su predecesor, el republicano Donald Trump, pero manifiestan que sí es probable que asistamos a un enfoque diferente y más “pragmático” a la hora de encarar una crisis que ha polarizado a la nación y a países de la región y el mundo interesados en su solución, se señala en una nota escrita por Belén Mora y Rosa Tania Valdés
La administración Biden no va a aplicar criterios ideológicos, sino criterios muy pragmáticos. ¿Qué hacer para que Venezuela salga de esta crisis tan terrible?”, dijo a la Voz de América el presidente de Diálogo Interamericano, Michael Schifter. “Lo que puede esperar Venezuela y los venezolanos es una nueva iniciativa más sofisticada para lograr un acuerdo político que lleve a una dinámica de una elección libre y abierta y a una transición política y democrática”, afirmó.
Valoró que para ello, la administración Biden podría valerse del apoyo de naciones como Cuba, Argentina o México, si esto resultara útil en el esfuerzo para conseguir que Venezuela salga del estancamiento y alcance la democratización. Expuso además que a su juicio el tema del uso de la fuerza o una opción militar están totalmente descartados a partir de este momento.
“Los venezolanos no van a escuchar ‘todas las opciones están sobre la mesa’, no van a escuchar retórica muy agresiva y amenazante contra Nicolás Maduro, pero sí pueden esperar una posición bastante firme. El presidente Biden ha dicho claramente que Maduro es un dictador, tiene muy claro que negociar con él es complejo”, dijo Schifter.
“Habrá un enfoque distinto, pero nadie debería subestimar la firmeza de la administración Biden en cuanto a su tratamiento hacia Maduro, creo que va a ser muy firme”, enfatizó.