Papa Francisco celebró misa del Domingo de Ramos sin la asistencia de fieles, desde la basílica de San Pedro del Vaticano.
Mientras estuvo hospitalizado, al paciente le detectaron otras enfermedades como una infección urinaria, conjuntivitis y una desnutrición
Este es el segundo año consecutivo que se celebra la misa del Domingo de Ramos sin la asistencia de fieles, debido a las restricciones por el coronavirus.
Se conoció, que el Sumo Pontífice instó a los cristianos a que recuperen “la capacidad de asombrarse” para “volver a comenzar” en un mundo marcado por la pandemia.
Papa Francisco
Con la celebración del Domingo de Ramos, inician los ritos de una Semana Santa marcada de nuevo por la crisis sanitaria causada por el coronavirus.
“Dejémonos sorprender por Jesús para volver a vivir, porque la grandeza de la vida no está en tener o en afirmarse, sino en descubrirse amados. Y en la belleza de amar”, aseguró el Papa.
Asimismo, destacó la importancia de acoger a los “descartados”, “humillados por la vida”, “rechazados” y dejar de ser “rehenes de la admiración y el éxito”.
Trascendió que, en la celebración que marca el inicio de la Semana Santa, el pontífice estuvo acompañado por una treintena de cardenales y varios religiosos; que respetaron en todo momento la distancia de seguridad.
Cabe destacar que, la liturgia se ofició en el altar de la Cátedra de la basílica de San Pedro, y no bajo el baldaquino, como se hacía hasta la llegada del coronavirus.
De igual manera, la tradicional procesión de las palmas se redujo a un pequeño recorrido realizado por los cardenales con palmas entre los escasos fieles presentes en el interior de la basílica; que fue decorada con algunas ramas de olivo.