La falta de combustible y el temor de los agricultores por sus cosechas en Mérida, se ingenian con nuevas formas para fumigar sus cultivos.
Por Jesús Quintero / La Patilla
Ante la falta de combustible y el temor de los agricultores en la zona alta del páramo merideño, se han ideado nuevas formas para fumigar sus cultivos y así evitar la perdida de las siembras, utilizan animales como el burro para fumigar y abonar las tierras.
Situación que se repite en varias localidades, dónde según han denunciado suman más de 30 días sin recibir despacho de combustible lo que imposibilita que puedan mover las maquinarias necesarias.
Inclusive también han bautizado las “mototritones” para trasladar las cosechas desde los paramos hasta ciudad.
Es de recordar que desde esta zona de Los Andes se cultivan y cosechan una importante cantidad de rubros de la dieta de los venezolanos y se distribuyen a cada rincón del país.