Londres será el primer objetivo estratégico parte de la OTAN en ser atacado por misiles rusos en caso de que estalle una Tercera Guerra Mundial, afirmó un aliado cercano del presidente Vladimir Putin.
Emily Atkinson – Independent en Español
Hablando en la televisión estatal rusa, Andrey Gurulyov, un parlamentario que forma parte del comité de defensa de Moscú, describió cómo funcionaría una posible invasión a gran escala de los estados miembros bálticos de la OTAN.
Gurulyov, excomandante militar y miembro del partido proPutin Rusia Unida, señaló: “Destruiremos todo el grupo de satélites espaciales del enemigo durante la primera operación aérea.
“A nadie le importará si son estadounidenses o británicos; los veríamos a todos como de la OTAN.
“En segundo lugar, mitigaremos todo el sistema de defensa antimisiles, en todas partes y al 100 por ciento. Tercero, ciertamente no comenzaremos en Varsovia, París o Berlín. El primero en ser atacado será Londres.
“Está muy claro que la amenaza para el mundo proviene de los anglosajones”.
Aseguró que una invasión era la única forma de evitar que Occidente bloquee Kaliningrado, un semienclave ruso entre Lituania y Polonia.
Gurulyov agregó que cortarían los “suministros de energía” (que dijo que también serían destruidos) de Europa occidental y que esta sería “inmovilizada”.
“En la tercera etapa, veré lo que Estados Unidos le dirá a Europa occidental sobre continuar su lucha en el frío, sin alimentos ni electricidad”, continuó. “Me pregunto cómo ellos [Estados Unidos] lograrán mantenerse al margen”.
“Este es el plan aproximado, y deliberadamente dejo de lado ciertos momentos porque no son para ser discutidos en la televisión”.
La guerra de Rusia ya entró en su quinto mes, lo que genera preocupaciones en Occidente sobre la “fatiga” causada por el actual conflicto mortal.
Ayer, Boris Johnson advirtió que aumentaría la presión para obligar a los ucranianos a hacer una “mala paz” debido a las tensiones económicas provocadas por el conflicto.
Cuando se le preguntó, en la residencia del alto comisionado en Kigali, qué quería decir con preocupaciones sobre la fatiga de Ucrania, Johnson respondió: “Sé que es difícil. Sé que es difícil en el Reino Unido. Sé que el costo de la comida ha subido. Todo el mundo está viendo esto y demasiados países dicen que esta es una guerra europea que es innecesaria.
“Es un problema económico que no necesitamos, por lo que aumentará la presión para animar, coaccionar, tal vez, a los ucranianos a una mala paz.
“Creo que el riesgo es que la gente no se dé cuenta de que es vital enfrentarse a la agresión. Si Putin se sale con la suya con la agresión en Ucrania, si se sale con la suya con la conquista cruda del territorio de otras personas, entonces la lectura para cada uno de los países aquí es absolutamente dramática: el colapso del sistema internacional. Y sería un desastre económico a largo plazo”.