Al menos tres personas fallecieron y unas 50 viviendas resultaron dañadas el lunes por el desborde del río El Castaño, en el estado central venezolano de Aragua, la región más golpeada en las últimas semanas por las torrenciales lluvias que azotan el país, informó el presidente Nicolás Maduro.
En Aragua “tenemos dos frentes de desastre natural”, indicó el gobernante en El Castaño, un sector de la ciudad de Maracay, adonde se dirigió en la noche del lunes luego de una reunión de trabajo con su equipo de gobierno en Las Tejerías de Santos Michelena, un municipio agroindustrial ubicado en el mismo estado y donde el 8 de octubre un alud dejó al menos 54 fallecidos y 8 desaparecidos, según las autoridades.
La saturación de agua en las montañas, que circundan la mayoría de los poblados en el norte del estado, han provocado deslizamiento de tierra y el desborde de quebradas y ríos, señaló Maduro en declaraciones difundidas por la televisión estatal. El presidente ordenó despliegue de la Fuerza Armada, entre otros organismos de seguridad y socorristas para brindar atención a los pobladores de El Castaño, sin dar otros detalles de los daños en ese sector de la capital de Aragua.
En tanto, las labores de limpieza y la remoción de escombros continúan una semana después en Las Tejerías, donde sus residentes apenas tuvieron unos segundos para ponerse a salvo el 8 de octubre, cuando grandes cantidades de agua, lodo, escombros, piedras y árboles cayeron sobre ellos por las laderas de la montaña que flanquea el municipio de 54.000 habitantes.
Protección Civil tiene un registro de 400 viviendas “completamente destruidas” y cerca de 800 con daños moderados a graves en Las Tejerías. También fueron dañadas escuelas primarias, un liceo y más de dos decenas de empresas.