La inscripción de los jóvenes en el registro permanente es poca, graneada y progresiva en la sede regional del Consejo Nacional Electoral (CNE). Quienes se inscriben lo hacen por tratarse de un requisito obligatorio para algún trámite. Dirigentes políticos y líderes estudiantiles coinciden en la necesidad de una campaña para la toma de conciencia de la importancia del voto, así como de mayor accesibilidad al registro.
Guiomar López | LA PRENSA DE LARA
Leodanny Rodríguez desea estudiar en la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (UNES) y se inscribió en el CNE sólo por tratarse de uno de los requisitos para su ingreso a esa casa de estudios. «Realmente tuve que hacerlo porque lo necesitaba», señala este joven, de 18 años y residente de Santa Rosalía. Luego de averiguar ante el Seniat en el centro de Barquisimeto, tuvo que bajar caminando junto a su hermana mayor. Les tocó más de 20 cuadras a pie, por no contar con suficiente dinero para cancelar varios pasajes en el transporte público.
Para José Monasterios, estudiante universitario, «necesitamos fomentar el voto y activar la democracia más allá del concepto». Insiste en que se debe recordar que la elección es una herramienta poderosa y sirve para fomentar liderazgos juveniles.
Rechaza que se caiga en el juego del cansancio o la resignación por el hecho de contar solamente con una máquina para toda la entidad. Llama a recuperar la confianza y tomar fuerzas para luchar por los cambios en el país.
Esa opinión es compartida por el dirigente político, Guillermo Palacios, quien menciona la necesidad de que el CNE ubique puntos más accesibles para el Registro Electoral en la entidad. «Esta es una de las trabas para los jóvenes», se queja y pide a las familias incentivar en los muchachos el sufragio.