Una avioneta Cessna 550 se estrelló la madrugada de hoy en un vecindario de San Diego, California, desatando un incendio devastador que afectó a 15 hogares y obligó a la evacuación de numerosos residentes. El accidente, ocurrido aproximadamente a las 3:45 AM (hora local) cerca del Aeropuerto Ejecutivo Montgomery-Gibbs, ha sido confirmado por la Administración Federal de Aviación (FAA).
Las autoridades han reportado al menos un deceso como resultado del impacto. Dan Eddy, subjefe del Departamento de Bomberos, declaró en una conferencia de prensa que se ha detectado más de una víctima mortal, aunque el número exacto de pasajeros a bordo de la aeronave aún no ha sido confirmado. Sin embargo, Eddy enfatizó que no se han reportado fallecidos ni heridos graves entre los residentes en tierra.
El accidente ocurrió en el vecindario de Murphy Canyon y, según Eddy, la visibilidad era extremadamente limitada debido a la densa niebla en el momento del impacto. «Apenas se podía ver lo que había adelante», señaló.
El desplome del avión provocó que combustible de aviación se esparciera por todas partes, lo que llevó a un rápido y extenso incendio que consumió no solo las viviendas sino también varios automóviles cercanos. Eddy describió la escena como un «impacto directo» en varias casas, con «materiales peligrosos en el lugar». Se han solicitado recursos adicionales, incluyendo el apoyo del ejército, para controlar la situación.
Christopher Moore, un residente de la zona, relató su experiencia traumática a The Associated Press, describiendo cómo él y su esposa escucharon un fuerte estruendo, vieron humo y rápidamente evacuaron su hogar con sus dos hijos pequeños.
Expertos de la FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) han iniciado una investigación exhaustiva para determinar la causa del accidente. La NTSB será la encargada de proporcionar actualizaciones sobre el progreso de la investigación.
Los servicios de emergencia continúan trabajando en la zona afectada, realizando búsquedas exhaustivas para asegurar que no haya más víctimas y para controlar completamente el incendio. Hasta el momento, no se ha transportado a ningún paciente al hospital, pero la situación sigue siendo de emergencia.