Un equipo de investigadores ha ideado una terapia innovadora para contrarrestar la pérdida de cabello originada por la alopecia areata, una enfermedad autoinmune.
Este avance se logró mediante el uso de un parche con microagujas que se aplica de manera indolora sobre las zonas afectadas de la piel.
La alopecia areata se caracteriza porque las células T, por un error, atacan los folículos capilares.
Para combatir la hiperactividad de las células inmunes, expertos del Brigham and Women’s Hospital y el MIT aplicaron reguladores de células T directamente en las áreas afectadas para frenar la actividad autoinmune.
Los resultados del estudio, que fueron publicados en «Advanced Materials», mostraron mejoras significativas y sostenidas en el crecimiento del cabello en modelos de ratones afectados por esta enfermedad.
“Nuestro sistema inmunológico se ha desarrollado para defenderse de la sobreactivación típica de las condiciones autoinmunes”, expresaron los investigadores a los medios de comunicación.