El gobierno de Estados Unidos está esperando ansiosamente la liberación de los ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela, según afirmó Brian Nichols, subsecretario estadounidense para asuntos del hemisferio. La administración del presidente Joe Biden tiene la esperanza de que el gobierno de Nicolás Maduro tome medidas para asegurar la liberación de estos ciudadanos en las próximas semanas, como parte de un acuerdo que ha llevado a un alivio en las sanciones energéticas impuestas por Washington.
Nichols enfatizó que Estados Unidos se toma este acuerdo muy en serio y espera que el gobierno de Caracas cumpla antes de finales de noviembre. El subsecretario expresó su confianza en que se lograrán estos pasos y se liberará a los ciudadanos estadounidenses que han sido detenidos indebidamente en Venezuela.
Estados Unidos ha autorizado de manera limitada las operaciones petroleras, gasíferas y del consorcio aeronáutico de Venezuela, a cambio de la habilitación de la candidata presidencial opositora María Corina Machado y la liberación de detenidos venezolanos y estadounidenses. Hasta ahora, solo se ha logrado la liberación de cinco de los más de 200 venezolanos detenidos por motivos políticos.
El plazo otorgado por la Casa Blanca vencerá el 30 de noviembre y si no se cumple, esto podría llevar al fin del alivio de sanciones, según el Departamento de Estado. Aunque el jefe negociador del gobierno de Maduro, Jorge Rodríguez, ha rechazado las presiones y calificado las expectativas de Washington como falsas, fuentes de la administración Biden aseguran que la contraparte venezolana es consciente de lo acordado.
Las acciones de acercamiento entre Estados Unidos y el gobierno socialista de Maduro han sido criticadas por legisladores republicanos, quienes las consideran apaciguadoras. Sin embargo, la liberación de los ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela es una prioridad para la administración de Biden.
Los ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela son Eyvin Hernández, Jerrel Kenemore y Joseph Cristella. Hernández, un abogado de Los Ángeles, fue detenido en marzo del año pasado en la frontera entre Colombia y Venezuela. Los familiares de Hernández han pedido a Biden que redoble los esfuerzos para lograr su liberación.
Kenemore, por su parte, ha estado detenido desde principios del 2022, acusado de cruzar ilegalmente al país y otros delitos no especificados. Tamara Suju, defensora de derechos humanos y directora ejecutiva de Casla Institute, ha denunciado que Kenemore ha sufrido torturas psicológicas y tratos crueles en su detención.
Cristella, de Florida, fue detenido el año pasado en circunstancias poco claras. La liberación de estos ciudadanos estadounidenses es un tema de preocupación para el gobierno de Estados Unidos, y se espera que se logren avances significativos en las próximas semanas para garantizar su regreso seguro a casa.