El canciller de Venezuela, Yván Gil, exigió este lunes ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el cese inmediato de las sanciones contra el país caribeño, y pidió reparación por los «daños, lesiones y pérdidas sufridas» para los «Estados afectados» por estas medidas, entre los que mencionó a Cuba.
«Los Estados responsables de imponer medidas coercitivas (…) deben cesar de inmediato estas medidas ilegales. Deben también brindar garantías y seguridades apropiadas de no repetición, así como las reparaciones por todos los daños, lesiones y pérdidas sufridas e infligidas a los Estados afectados y a su población», manifestó Gil ante la Asamblea General de la ONU, en la 78ª sesión plenaria.
Sobre Venezuela, aseguró que «son más de 1.000 las llamadas sanciones que el Gobierno estadounidense y sus satélites europeos» aplican, «desde ya hace 10 años», contra el país caribeño.
A su juicio, las sanciones «representan hoy el mayor obstáculo para la implementación de los planes del desarrollo de las naciones» y «provocan también graves y negativas repercusiones en el ámbito humanitario, amenazando la vida y el bienestar de los pueblos».
«Impiden el acceso a los servicios de atención sanitaria, al acceso y a la adquisición de medicamentos, de suministros médicos, de equipos y servicios, así como el desarrollo, la compra y el suministro de vacunas», añadió Yván Gil.
De igual forma, enfatizó que las «medidas coercitivas unilaterales, incluidas aquellas impuestas como instrumentos de coacción política o económica y financiera contra cualquier país, en particular, aunque no exclusivamente, contra los países en desarrollo, son ilegales, además de crueles e inhumanas».
En este sentido, mencionó que uno de los que tachó como «ejemplos más infames de esta fracasada política» de sanciones es el «bloqueo económico, comercial y financiero» impuesto contra Cuba por «más de 60 años».
«Instamos al Gobierno de los Estados Unidos de América a poner fin, de inmediato y sin condiciones, al bloqueo contra ese hermano país y a excluirlo de la lista arbitraria y unilateral de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo», expresó el canciller.
Además, denunció lo que consideró como una «escalada» de «las prácticas intimidatorias, en particular en forma de supuestos aranceles», en referencia a las medidas tomadas por el presidente estadounidense, Donald Trump.
«Los llamados aranceles (…) persiguen objetivos diferentes relacionados con el comercio, puesto que, en realidad, procuran objetivos similares a los de las políticas, de las medidas coercitivas unilaterales, que el Gobierno estadounidense ha abrazado por décadas», señaló.
Yván Gil advirtió que «la aplicación continuada» de las sanciones repercutirá «negativamente en la economía mundial» y «causarán y prolongarán el sufrimiento humano», a menos, agregó, que se «les ponga fin de forma completa, incondicional e inmediata».
EFE