En una apelación emotiva, el Papa Francisco denunció la trágica pérdida de casi 2.000 vidas de hombres, mujeres y niños que han intentado cruzar el mar Mediterráneo hacia Europa en lo que va del año. Durante el rezo del Ángelus dominical en la plaza San Pedro del Vaticano, el Pontífice expresó su dolor y vergüenza por la situación y exhortó a una respuesta política y diplomática para prevenir futuras tragedias en el mar.
Con información de Infobae
El Papa Francisco hizo un llamado a la comunidad internacional para tomar medidas concretas para sanar el drama migratorio con solidaridad y fraternidad, buscando prevenir naufragios y rescatar a los que se aventuran en el peligroso viaje. Enfatizó que la situación es urgente y subrayó la importancia de no ser indiferente ante estas tragedias humanas.
La grave situación en el Mediterráneo ha llevado a un número creciente de barcazas precarias a intentar llegar a las costas europeas, a menudo resultando en tragedias mortales. El Papa destacó que solo en la isla de Lampedusa, más de 2.000 migrantes esperan asistencia en un centro de acogida diseñado para solo 400 personas.
En respuesta a la crisis, el Gobierno italiano ha solicitado la ayuda de barcos humanitarios, como el Ocean Viking y el buque Open Arms, para realizar operaciones de rescate y socorro. Sin embargo, la capacidad para atender a todas las embarcaciones es limitada, lo que subraya la necesidad de una colaboración internacional más amplia.
El llamado del Papa Francisco es un recordatorio poderoso de la importancia de abordar esta crisis humanitaria de manera urgente y efectiva. Su llamamiento a la solidaridad y la acción política y diplomática resuena en un momento en que la tragedia en el Mediterráneo continúa cobrando vidas inocentes.