Este lunes Francia ha instado a que Irán y Venezuela puedan volver al mercado petrolero, a la vez que ha solicitado que los países que abastecen el mercado internacional de petróleo aumenten su producción «excepcionalmente», según recoge Le Parisien de fuentes del Elíseo.
Las medidas solicitadas por el país galo, justo cuando se encuentran reunidas las siete principales potencias económicas occidentales en Alemania, en la Cumbre del G7, pretenden poner freno al alza desmesurada que han experimentado los precios de los combustibles en los últimos meses.
Uno de los principales motivos del incremento del coste de estas materias primas se encuentran en el conflicto en suelo ucraniano. Por este motivo, los jefes de Estado y de Gobierno reunidos en Alemania están «muy cerca de un punto en el que decidirán pedir a sus ministros que desarrollen urgentemente mecanismos para limitar el precio del petróleo ruso a nivel mundial», ha explicado un alto funcionario de la Casa Blanca.
El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, se pronunció a favor de la iniciativa este lunes, después de que el domingo los líderes del G7 acordaran apoyar a Ucrania «durante el tiempo que sea necesario», brindando «apoyo financiero, humanitario, militar y diplomático».
«Aquí en el G7 creo que nos estamos dando cuenta de que la fiesta de hidrocarburos rusos ha terminado y todos están buscando nuevas vías de adaptación», señaló el domingo el primer ministro británico, Boris Johnson, sobre los problemas inflacionarios y los altos precios de la energía que ha ocasionado el conflicto en Ucrania y la necesidad de encontrar nuevos proveedores energéticos y apostar por el desarrollo de fuentes limpias de energía.