Por las devastadoras consecuencias de la pandemia, la desocupación, que en marzo había sido 4,4%, subió 10 puntos porcentuales en un solo mes. El récord histórico fue 24,9% en 1933, en el peor momento de la más grave crisis económica de la era moderna
La desocupación en Estados Unidos registró el mayor salto de su historia por la pandemia de coronavirus en abril, con la destrucción de 20,5 millones de empleos. El Departamento de Trabajo informó este viernes que el 14,7% de la fuerza laboral está desocupada, 10 puntos más que en marzo, cuando se había reportado un 4,4 por ciento. Nunca antes se había producido un incremento de esa magnitud en tan poco tiempo. La cifra resulta incluso más impactante cuando se la compara con el 3,5% de febrero, que había sido la más baja en 50 años.
Estados Unidos, que es el país con más casos y muertos por Covid-19 —con más de un millón de contagios y 75.000 decesos—, registró 3,2 millones de nuevas solicitudes de beneficios por desempleo durante la semana del 26 de abril al 2 de mayo. Esas cifras elevan a 33,5 millones el número de solicitudes presentadas desde mediados de marzo, cuando la crisis sanitaria obligó a las empresas a cerrar sus puertas y más de 94% de la población fue llamada a confinarse para detener la propagación del virus.
Los beneficios para personas sin empleo se han extendido temporalmente a trabajadores que anteriormente no podían reclamarlos, como los independientes. El pico de pedidos se alcanzó a fines de marzo, con 6,8 millones de nuevos desempleados en una semana. Desde entonces, la baja en las solicitudes ha sido muy lenta, y el tiempo en que se registraban 200.000 o 250.000 nuevos demandantes cada semana parece estar muy lejos.
La economía estadounidense nunca había perdido más de 2 millones de puestos de trabajo en un solo mes y algunos economistas estiman que en abril pueden haber sido incluso más de los 20,5 millones registrados. En comparación, se perdieron 8,6 millones de empleos durante los dos años de la crisis financiera mundial que comenzó en 2008. Por lo tanto, la Gran Recesión de 2009 ya no es el punto de referencia, sino la Gran Depresión de la década de 1930.
El desempleo empieza a acercarse al récord histórico, que fue del 24,9% en 1933, en el peor momento de la crisis económica mundial más severa de la era moderna. Pero ni siquiera en ese contexto se había producido un cambio tan brusco. Entre 1929 —cuando se produjo el crack en Wall Street— y 1930, trepó menos de seis puntos, de 3,2 a 8,7 por ciento. Al año siguiente subió siete, hasta 15,9%, y en 1932 se produjo el salto más importante hasta el actual, cuando la suba rozó los ocho puntos y se ubicó en 23,6 por ciento.
Durante toda la década de 1930 la desocupación se mantuvo por encima del 14 por ciento. Si bien la disparada fue ahora mucho más fuerte, nadie espera que la crisis sea tan larga. Desde 1941 en adelante, solo en dos ocasiones Estados Unidos volvió a tener una tasa de dos dígitos: en 1982, cuando llegó a 10,8%, y en octubre de 2009, cuando alcanzó el 10% como consecuencia de la crisis financiera internacional del año anterior.
El presidente Donald Trump considera la reapertura de la economía una prioridad. “Este país no puede permanecer cerrado y bloqueado durante años”, dijo este jueves. Algunos estados ya anunciaron planes para levantar las restricciones.
“Esperamos el inicio de un repunte (económico) en junio a medida que los estados comiencen a reanudar la actividad”, pero el ritmo al cual las empresas volverán a contratar no está claro, dijo Ian Shepherdson, de Pantheon Macroeconomics.
Hacia una nueva depresión
“Estamos viendo lo que parece ser la peor crisis económica desde la Gran Depresión”, dijo el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, mientras en el Congreso se debate un nuevo plan de estímulo económico luego del megapaquete de 2,2 billones de dólares aprobado en marzo.
Encuestas publicadas el jueves mostraron señales preocupantes de la crisis económica, alimentando la especulación de que Estados Unidos enfrenta una recuperación dolorosa. La productividad en el primer trimestre de 2020, que incluye solo unas pocas semanas en las cuales varias regiones del país estaban bajo orden de cierre, cayó un 2,5% en comparación con el cuarto trimestre de 2019, resultado de una caída de la producción del 6,2% y un 3,8% de reducción en el número de horas trabajadas.
“Las esperanzas de una recuperación sostenida de la productividad se están desvaneciendo”, señaló la consultora Oxford Economics en un análisis.
La firma global de servicios de recolocación Challenger, Gray & Christmas dijo que los recortes de puestos de los empleadores con sede en Estados Unidos aumentaron en abril a 671.129, el número más alto desde que comenzaron a registrarse en enero de 1993.
“La naturaleza indefinida de esta pandemia, junto con el hecho de que estamos viendo datos económicos a nivel de recesión o incluso depresión, significa que la gran mayoría de estos trabajos no volverán pronto”, dijo el vicepresidente senior de la firma, Andrew Challenger.