El economista Aarón Olmos, CEO de Olmos Group Venezuela, profesor invitado del IESA, y co-autor del Paytech Book y A.I. Book (Fintech Circle UK Book Series) conversó en exclusiva con Banca y Negocios sobre la realidad de las criptomonedas en Venezuela.
Alejandro Ramírez Morón / @aleramirezve – Banca y Negocios
Olmos se decanta por hacer algunas consideraciones de base: “Para nadie es un secreto que Venezuela es un país con una situación sociopolítica y económica muy compleja, motivado a la gran cantidad de distorsiones que hay, primero en lo político, luego en lo geopolítico, y después cómo todo eso ha afectado lo económico y lo social”, explica.
“Seguimos teniendo grandes niveles de pobreza, pero que la gente no entiende porque tiene múltiples factores. Una persona puede tener su camioneta y su casa en la playa y a la vez ser pobre. ¿Por qué? Porque no tiene cómo cubrir sus necesidades fundamentales al 100% siempre. No por los indicadores de las multilaterales que hablan de vivir con menos de 1 dólar al día, o qué se yo”, da cuenta de la realidad del entorno económico del venezolano corriente.
Expone que, en el caso de Venezuela, la pobreza es más compleja porque hay elementos políticos, sociales, religiosos, económicos -de acceso- que han hecho que el país “se abra”, pero ya tenemos 47 meses de hiperinflación. ¿Qué el país “se abra” a qué? A métodos alternativos que le representen resguardo del valor de su trabajo, esencialmente porque el valor intrínseco del trabajo en Venezuela se pierde a gran velocidad. «Estamos en hiperinflación y nadie está haciendo nada para que se detenga», echa de menos el académico.
“Hemos visto en los últimos meses una disminución del índice de precios, pero hay que recordar que se mide en bolívares, los cuales se están dejando de usar en el país. Estamos comenzando a usar mayor cantidad de divisas –digitales o físicas- o criptoactivos. Entonces como ese índice de precios no toma esto último en cuenta, sino que mide bolívares, está midiendo la caída de una canasta donde ya se compra menos en bolívares, pero se compra más en moneda extranjera”.
La caída de la inflación –analiza- no tiene que ver con política económica sino con el propio comportamiento del mercado. Los venezolanos están escogiendo qué medio de pago usar. Y los comerciantes también están abiertos a aceptar cualquier otra cosa distinta al bolívar, que les represente mayor valor y garantía.
Olmos va a las fuentes autorizadas en la materia: “Una de las pocas empresas que miden los criptoactivos en el mundo es Chainalysis. Esta firma levantó data de 154 países en el informe 2020/2021. Una de las principales características de los países Top es que tienen fuertes distorsiones económicas, o con regímenes no muy democráticos, o simplemente nada democráticos. Con grandes problemas de pérdida de valor de la moneda, valga decir inflación galopante, o hiperinflación, y grandes situaciones de pobreza y desempleo. Se cuela una que otra gran economía”, desvela una realidad que puede sorprender.
Venezuela -para el ranking 2020- aparece en la posición número 3. En el top 10 de 2021, Venezuela aparece en la posición número 7. El enfoque del informe 2020 –indica Olmos- era cómo y quién usa los criptoactivos. Se verificó que había mucho interés desde Venezuela, visitando sitios web, en criptoactivos, criptomonedas. “Eso no quiere decir que todo el territorio nacional está usando criptomonedas, sino que hay interés por direcciones IP desde Venezuela en páginas que tienen que ver con criptoactivos, con respecto a los demás países”, aclara Olmos.
Esto indica que esa es una posición de interés, no de operaciones. Chainalysis no tiene capacidad de saber nada sobre las operaciones, pone en claro. “En 2021 el informe cambia su orientación y la pregunta fue si se están usando cripto para pagar bienes y servicios, para ahorro. Ahora queda Venezuela en la posición 7, y los otros países están en condición de distorsión, pero tienen más conciencia de lo que es el mercado de los criptoactivos. El informe 2021 sí indica que en Venezuela se está usando más cripto como medio de pago. Importante remarcar que Chainalysis no tiene capacidad en 2021 de medir operaciones”, subraya el portavoz.
-Las criptos que más se usan-
Pero, ¿cuáles son las criptos que más se usan en Venezuela? En América Latina se usa Bitcoin en 60% de las transacciones con criptomonedas. En porcentajes entre 20 y 25% criptomonedas estables, o sea que son datos digitales que representan uno a uno el dólar.
“Se están utilizando más para remesas. Si una persona usa, por ejemplo, Western Union y manda 100 dólares, al familiar le llegan 80 dólares. Por esto el uso de cripto. Predomina Bitcoin, sigue Dash, en Venezuela se sigue usando el Ether, entre otros. Pero hay que meter por obligación a los USDT, que son las criptomonedas estables, porque muchos venezolanos han aprendido que pueden recibir el equivalente a dólares”.
En Olmos Group llevan una estadística propia de Bitcoin, y esto es así porque las empresas que son plataformas de intercambio, no necesariamente revelan la data. “En mi caso que soy docente e investigador desde hace años, mi experiencia es que no proveen información. Pero de la base de datos de Localbitcoins, que si está abierta, yo tomé algo”, indica con un guiño de astucia intelectual.
A nivel del comportamiento de Venezuela en la plataforma Localbitcoins, desde el cuarto trimestre de 2014 –que es cuando el PIB en Venezuela se hace negativo-, y comenzamos a tener una alta inflación, comenzamos a ver un alza de las operaciones en Localbitcoins por parte de los nacionales.
En el país se pasó de 190,97 Bitcoins en 2014 a 2.059,46 en 2015. En 2016 se escaló a 8.624.33. “Y así comenzó a crecer el intercambio de cripto hasta 2019 que es el pico más alto con 50.132,82 operaciones, en volumen intercambiado, y a partir de 2020 cuando el gobierno permite el uso de otros medios de pago como Zelle disminuye el uso de cripto”, se detiene en el descenso de la curva.
“Esto se debe al mayor flujo de divisas y la migración de los usuarios a plataformas como Binance, que es más robusta. Hay una correlación entre la caída del PIB, el incremento del uso de cripto, el aumento de la hiperinflación, el descenso en la cantidad de cajeros automáticos, agencias bancarias, comienzan a usarse más plataformas digitales: el venezolano comenzó a utilizar cosas distintas al bolívar”.
-Montos nada despreciables-
Las personas y las empresas cuando reciben pagos en bolívares los gastan rápido, y luego los cambian a dólares o cripto. ¿Qué representa la ya citada cantidad de operaciones de 2019? “Bueno, esas 50.132,82 bitcoin representan 303.348.117, 16 dólares, que no pasaron por el gobierno. Es una gran cantidad de dólares desde adentro hacia afuera y viceversa. Estos son datos sólo de Bitcoin y de Localbitcoins, o sea, que eso se queda corto porque hay otras criptomonedas. Es un indicio de hacia dónde se está moviendo el mercado en Venezuela”, refiere el entrevistado.
Sin embargo, es imposible no preguntarse: ¿Quiénes mueven criptoactivos en Venezuela? “Es difícil saber quiénes son y dónde están. El mercado de criptoactivos en Venezuela desde hace 9 años originalmente era un mercado muy pequeño, marginal, personas que se acercaron por la innovación que representaba Bitcoin. Cuando la situación en Venezuela arreció por el tipo de cambio, mucha gente buscó vías alternas. Empresarios, militares, gente del Gobierno entendió qué era esto. Hablamos de 2014 cuando ya había algunos mineros que habían comprado equipos», recuerda Olmos.
Y añade: «Es desde 2017 que el gobierno se interesa en este mercado de verdad, por las sanciones que comenzaron en 2015. En esa época gente normal estaba tratando de hacer trading, es la época de las arepas de yuca, cuando la gente perdió peso, etcétera”, cae en la cuneta de lo que tristemente se popularizó como “la dieta de Maduro”.
Desde que el Petro sale a la luz –relata el CEO de Olmos Group- se le comienza a dar más relevancia. De hecho se sabe que gente del Gobierno tiene granjas de minería, indica Olmos. “He sabido que la casa de Exchange Criptolago no es una empresa privada sino gubernamental, que va de la mano de Omar Prieto, ex gobernador del Zulia. Muchos sectores militares, de poder, políticos, se han involucrado en minería. Quizás muchos venezolanos de estratos medio y bajos tienen sus cuentas en Binance, tienen una cuenta en Localbitcoins, etcétera. Chainalisys hizo un estudio sobre Criptolago y daba cuenta de que se había movido una gran cantidad de dinero, lo cual llamó la atención. Muchos factores de poder estar usando cripto”. Es un universo no exento de sorpresas llamativas.
aaron olmos
Aarón Olmos: «Empresarios, militares, gente del Gobierno entendió qué era esto. Hablamos de 2014 cuando ya había algunos mineros que habían comprado equipos».
-Factores de poder-
¿Toda la plana mayor del ejecutivo está metido en esto? ¿Toda la plana mayor de Fedecámaras está metido en esto? “No te sabría decir, porque son informaciones muy privadas. Pero sí puedo decir que gente de mucho dinero está instalando granjas de minería. Esto hace inaccesible al común de los mortales este tipo de inversiones. La gente recibe remesas y lo pasan a USDT a Bitcoin, es lo que mayormente estamos viendo”.
Y dispara un dardo certero y cartesiano: “El gran bulto de operaciones no las están haciendo las personas comunes y corrientes. Sí hay una comunidad de bitcoiners, pero no son los que más dinero están moviendo. Pero no hay data disponible para conocer las dimensiones del mercado cripto en Venezuela. Sin embargo se maneja un número de 1700 negocios que aceptan criptomonedas, pero ese es un dato engañoso. Mucha gente usa billeteras digitales. Sabemos de algunas plataformas como Localbitcoins, Binance, Criptobuyer, ente otras, pero hay más empresas que no conocemos. Es más lo que no se sabe que lo que se sabe. Mucha gente se ha dado a la tarea de decir que hay en este país un proceso de adopción masiva de cripto, lo cual no es cierto”, da al traste con los mitos que corren en ciertas publicaciones.
Ahora bien, ¿qué pasa con el marco institucional de las cripto en Venezuela? Desde 2017 Venezuela tiene la creación de un Petro y de una superintendencia, la Sunacrip. No es sino hasta el 30 de enero de 2019 que tenemos una ley. Se crea todo un andamiaje para el Petro. Pero desde el 4 de febrero de 2019 comienzan publicarse normas que le dan forma al mercado.
Entonces, el país cuenta con una superintendente, cuatro intendencias, una unidad contra la legitimación de capitales, una tesorería de criptoactivos, a partir de Sunacrip se otorgan licencias para mineros, para casas de intercambio (hay 12 en total), y todas ellas están autorizadas para hacer operaciones con Bitcoin, Dash, Ether, Litecoin y con el Petro.
-Un complejo andamiaje legal –
“En diciembre de 2018 el Banco Central de Venezuela generó una resolución para regular a proveedores de pagos no bancarios. Al 29 de octubre de este año, el BCV sacó un comunicado diciendo que no iba a recibir más empresas. Pero este año, en gaceta fechada en julio, se instruye a Sudeban sobre las normas para la creación de instituciones de tecnología financiera bancaria. Estas son empresas que se crean como generadoras de tecnología, pero cuando lees la gaceta entra hasta el heladero. En resumen: tenemos Sunacrip, BCV y Sudeban. Las empresas Fintech tienen que ser supervisadas por Sudeban”. Así de dura es la tenaza del gobierno de Maduro.
“Tenemos todos estos entes, una gran cantidad de normas, para hacer operaciones cripto. Desde febrero de 2020 tenemos una norma contable. Somos el cuarto país del planeta que tiene una norma contable para operaciones de criptoactivos. El panorama institucional en Venezuela es bastante interesante. La Oficina Nacional de Finanzas Públicas, poco después también publicó sus normas. Es un entramado bastante grande”, señala Olmos.
El analista establece que el artículo 32 de la Ley Antibloqueo legaliza el uso de las criptomonedas para hacer pagos Venezuela-Rusia, Venezuela-China, etcétera. Al registrase en la contraloría de criptomonedas, la Sunacrip conoce los montos de las transacciones. El único criptoactivo que globalmente está sancionado por EEUU es el Petro. Con el paso del tiempo se dejó de hablar del Petro, y ya no fue referencia del salario mínimo.
-¿Es posible que algunas empresas o particulares se estén refugiando en las criptomonedas por temor a que el Gobierno corte la circulación de los dólares?
-El miedo es libre y que está allí. Yo estoy sorprendido de la gran cantidad de personas que confían en el sistema financiero de los bancos, y estén depositando allí sus divisas. Más de 57% de las captaciones que se hacen en Venezuela son en moneda extranjera. Tenemos más de 2.500 millones de dólares circulando en el país. Son 8 bancos los que concentran el mercado. Nadie dice que el gobierno no puede confiscar esas divisas y que las va a pasar a la gente en Petro.
Algunos mantendrán el cash, otros invertirán en cripto porque sigue siendo libre y nadie los puede confiscar. Dentro de la estrategia de muchas personas está mantener parte de sus ingresos en algo que no sea confiscable. Allí es importante estar informado sobre las plataformas donde se tienen las cripto. Hay que instruirse para manejarse correctamente.
-El gran ascenso de Bitcoin –
De su lado, Carmen Salvador es inversionista en mercados financieros, CEO de Fintech 4.0 y CEO de Bitcoin Café Venezuela. “En 2021 las criptos han crecido muchísimo, actualmente hay más de 13.800 proyectos criptos a escala mundial; Bitcoin viene de 2020, cuando ocurrió un ‘halving’ que es un proceso de partición de la recompensa, y este es el tercero. Normalmente, este proceso hace que el precio se eleve y conquiste valores históricos. Primero, llegó a 64.000 dólares, y luego hubo un retroceso luego que China restringiera mediante comunicados oficiales la minería en su país, bajó a 28.000 dólares, y ahora está en 69.000 dólares”.
Expone que no existen datos totales de cuánto se mueve en Venezuela. Los Exchange mundiales no dan esa cifra, ni los nacionales, pero sí hay un crecimiento. Ha crecido la usabilidad por razones de remesas, y lo están haciendo a través de cripto, por temas transfronterizos. Hay tres usos: como refugio de valor, como inversión y como pagos transfonterizos.
“La Sunacrip ha venido estableciendo una cantidad de normas para que se desarrolle la minería digital, el tema de las casas de cambio. Cada país está llamado a hacer cada vez más regulaciones, pero hasta ahora ellos han estado abocados a garantizar una serie de requisitos y regulaciones. Esas leyes están en evaluación y deben ser perfeccionadas con el tiempo”, opina.
Hay mucha prensa que da cuenta de que en Venezuela hay un boom cripto, pero no hay elementos fácticos para verificar si eso es cierto. “Lo que sí está claro es que cada vez la gente se interesa más, por temas transfronterizos y como refugio de valor”.
Salvador percibe que no existe un temor real sobre un posible fin de de la dolarización y menos una confiscación de las divisas en cuentas. “Lo que yo regojo entre mis alumnos no tienen esa motivación. Primero los que compran cripto lo hacen porque estamos en hiperinflación, otros por la facilidad transfronteriza. Una tranferencia internacional entre bancos puede implicar una comisión hasta de 60 dólares, con cripto las comisiones son bajas o no existen. Otros demandan para inversión, para hacer trading, porque ven la noticia de nuevos valores históricos. Haace 13 años que se creó con un valor de centavos de dólar y ahora llegó a 69.000 dólares. Por eso muchos lo ven como una herramienta de inversión patrimonial”, concluye.