El 2020 cierra con 5,4 millones de venezolanos como migrantes y refugiados; lo que equivale a 18% de la población y se estima que el próximo año la cifra alcance los 7 millones de venezolanos fuera de su país
David Smolansky, comisionado de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, ofreció un balance del comportamiento de la migración venezolana; la cual no se ha paralizado a pesar de la pandemia por el coronavirus..
Smolansky recordó que esta crisis es la más grande en la historia de América Latina y el Caribe y solo es superada por la crisis de migrantes de Siria. El 2020 cierra con 5,4 millones de venezolanos como migrantes y refugiados; lo que equivale a 18% de la población.
Sin embargo, el Comisionado de la OEA para los migrantes venezolanos estima que si no hay una solución política a Venezuela, a corto plazo, que lleve al país hacia la democracia, «en 2021 puede haber más refugiados venezolanos que sirios. Se puede llegar a la cifra de entre 6 y 7 millones de refugiados venezolanos», considera.
Smolansky reitera que todo dependerá del comportamiento de la pandemia del coronavirus el próximo año y de si las fronteras, principalmente la de Colombia, se mantienen cerradas o si se abren. «Si se abren las fronteras en el primer trimestre de 2021 se pueden alcanzar los 7 millones de venezolanos huyendo de su país», afirma.
Estatus de refugiados
David Smolansky explica que desde la oficina que tiene a cargo siempre han abogado porque a todos los venezolanos que huyen de su país tras la crisis económica, política y social se le otorgue en la región el estatus de refugiado y aunque no se ha logrado, asegura que «se ha avanzado en ese sentido». Brasil está otorgando esta condición y más de 46.000 venezolanos en ese país la han recibido.
No obstante, indica que 803.796 venezolanos han solicitado refugio o asilo en todo el mundo, pero solo 143.402 han recibido respuesta positiva; es decir, de cada ocho venezolanos que la piden, solo uno la recibe, mientras que los otros siguen esperando respuestas.
Del mismo modo, Smolansky lamenta que la crisis de migrantes venezolanos sea la que menos recursos ha recibido. Detalla que «un refugiado sirio, per cápita, ha recibido 5.000 dólares; mientras que un refugiado venezolano, per cápita, ha recibido 255 dólares».
En total asegura que para atender a los migrantes venezolanos se han recaudado 1.300 millones de dólares. En ese sentido, asevera que ha faltado «mayor cooperación por parte de la comunidad internacional para esta crisis de varias aristas».