El río Bravo en EEUU se ha convertido en un punto vital para el ingreso irregular de migrantes procedentes de Venezuela
«Irma», como se conoció en los medios de comunicación a la señora oriunda de Maracaibo que cruzó el Río Bravo para entrar a EEUU en brazos de un joven venezolano, ya se encuentra con su familia
La señora, cuyo nombre es Irma Guillén de Duarte, está sentada en una silla de ruedas en lo que parece ser el pasillo de un hospital junto a sus familiares, según una fotografía difundida en las redes sociales.
Dos días después de que se entregara a las autoridades migratorias de EEUU para iniciar su registro, los familiares de la señora aseguraron que estaba «bien de salud». El Pitazo informó que Héctor López, abogado especialista en migración, dijo que la señora ya estaba en libertad y en camino a reunirse con su hija.
Desde hace varias semanas, autoridades migratorias en EEUU, específicamente en Texas, han estado recibiendo un contingente de migrantes venezolanos que buscan cruzar a pie la frontera con México y así tener acceso a una mejor calidad de vida que la que dejaron en nuestro país.
El 26 de mayo, el drama de nuestros nacionales que salen a buscar mejores oportunidades quedó una vez más retratado con las imágenes de una venezolana de 80 años de edad, quien cruzó el río Bravo en brazos de un joven. La mujer responde al nombre de Irma y dice que es oriunda de Maracaibo, estado Zulia.
Las fotos, tomadas por el reportero gráfico de Reuters Go Nakamura, evidencian a una octogenaria de contextura física muy delgada, vestida con un mono gris y suéter rosado, lo que sugiere que apenas se podía mantener en pie. Era ayudada por otro joven residente de la capital zuliana, y quien posteriormente fue identificado como César Andrés Padrón.
Al parecer, Irma se habría desmayado tratando de cruzar el río y Padrón se ofreció a auxiliarla para terminar de hacer la travesía y llegar a suelo estadounidene. Junto a ellos llegó un grupo de venezolanos y se vio un patrón similar donde se ayudaban entre sí para llegar.
Algunos llamaron «tierra bendita» a EEUU apenas cruzaron el río Bravo, mientras que otros afirman que «salimos del infierno de Diosdado» Cabello, argumentando que existe persecución contra las personas que piensan distinto a la administración de Nicolás Maduro.