El estratega político Juan José Rendón insistió este jueves en que el gobierno/AN no estuvo al tanto de la Operación Gedeón y que los militares que participaron en ella fueron víctimas de un embaucador, en referencia a Jordan Goudreau. Reiteró que el contrato se anuló en noviembre.
Jesús Herrera / ND
“Ese señor (Goudreau) usó ese papel (contrato) para decirle a otra gente que tenía un acuerdo. Que ese monto era gigante. Que contrató gente. Que levantó dinero no sabemos de dónde. Que compró unas armas no sabemos cómo. Las llevó para allá no sabemos cómo tampoco (…) y todavía este señor insiste en mandar estos muchachos a una operación suicida. Yo creo que lo hicieron de corazón y se inmolaron por la patria, porque son víctimas de un embaucador”, apuntó.
“Lo más triste es que puedo decir que esos jóvenes son parte de un montón de grupos autónomos que no dependen del gobierno de Guaidó, investidos en el 350 constitucional. Hay militares exiliados pensando cómo ellos recuperan a su país y esto es una demostración de la desesperación de estos jóvenes. Prácticamente se inmolaron. Son unos mártires, y así hay otros que no están bajo el control. No hay manera de controlar la desesperación que tiene la gente por recuperar su país”, añadió.
“Los dos jóvenes que interceptaron en La Guaira tenemos que pensar que eran infiltrados. No eran patriotas. Yo creo que la mayoría de los que estaban ahí eran patriotas y cayeron en las manos de este señor que los embaucó. Donde también estuvo Clíver Alcalá y los embarcaron en una misión suicida. Eso se viene infiltrado desde hace dos meses. Dijeron en VTV quiénes eran, ¿quién va a hacer una operación chapucera sabiendo que está infiltrada? Eso no tiene ni pies ni cabeza. Eso fue una operación suicida y el que los llevó es un gran irresponsable”, precisó.
Reiteró en que nunca se llegó a concertar un acuerdo con Goudreau y que fue hasta finales de octubre las conversaciones que se tuvieron con el ex boina verde, haciendo entender que actuó por sí solo y con apoyo del hoy preso Clíver Alcalá.
También, enfatizó, como lo hizo al The Washington Post y a CNN, que Goudreau está cobrando por servicios que no ejecutó y lo instó a que, si cree que dicho contrato está vigente, vaya a Cortes de Cobranzas de EEUU a demandar al gobierno de Guaidó.
“Si Goudreau cree que ese contrato está vigente y quiere reclamar su pago debería meter una demanda. Las cobranzas se hacen en Cortes de Cobranza. No se hacen en medios de comunicación. Haciendo gira de medios de una semana mientras a la gente la están matando y capturando en una misión suicida. Pareciera que fuera una campaña promocional”, apuntó.
Firma de Guaidó
JJ Rendón volvió a recalcar que en ese acuerdo no existe la rúbrica de Juan Guaidó, y por tanto, desconoce cómo fue que llegó la firma del diputado a los documentos.
“El acuerdo no se firma a espalda del presidente ni con la anuencia. Se firma bajo un proceso autónomo de la comisión y su proceso exploratorio. El presidente explícitamente da la orden de no continuar con ese proceso y se cancela. Se frena. Se termina a finales de octubre del año pasado y se les notifica a las personas que eso quedó sin efecto y se ratificó la primera semana de noviembre. Desde esa semana hasta la presente no se tuvo comunicación con ese señor. El acuerdo tenía que ser perfeccionado (…) y ese proceso de diligencia no fue satisfactorio para poder seguir. Y no solo se dejó sin efecto, sino que se eliminó cualquier tipo de comunicación con ellos”, apuntó.
Acotó que Guaidó no dio “luz verde” a ninguna operación y que todos los documentos que, dijo, fueron firmados, tampoco cuentan con la firma del presidente de la AN.
“El presidente decidió en un momento que no era lo que había que hacer. Yo sigo siendo estratega principal y mi cargo principal es planificar el cese de la usurpación y esos análisis se siguen y se seguirán haciendo. El presidente no dio luz verde a ninguna operación”, señaló.
“Es una acción autónoma, liderada por gente no sacrosanta, apoyada por militares amantes de su patria que lamentablemente cayeron en las garras de estos dos (Goudreau y Alcalá). Una misión suicida”, subrayó.