La apertura que el Ejecutivo Nacional está mostrando en temas tan importantes como la dolarización y el diálogo con los sectores es, definitivamente, una de las medidas más acertadas del presidente Nicolás Maduro.
La semana pasada hablamos del inicio de los acercamientos con los gremios empresariales y valoramos el gesto.
Esta semana se destaca la posibilidad de negociaciones políticas para acabar con la polarización que, al final, termina incidiendo en la crisis económica. En nuestros análisis siempre aseguramos que la crisis no tiene color político.
Sin embargo, la inestabilidad política sí genera efectos adversos sobre la recuperación económica que el país necesita.
Por ello, sabemos que el presidente Maduro avanzará en varios temas. Con la Asamblea Nacional tiene previsto trabajar en leyes que destraben varios obstáculos para estimular el aparato productivo.
Igualmente, se avanza en la designación del nuevo CNE. Esto, con miras a generar condiciones para las elecciones de gobernadores y alcaldes de este año. La idea es que haya confianza de los factores internos y que haya una participación en este proceso. Al fin y al cabo, las elecciones bien llevadas generan consecuencias positivas, sobre todo hacia el exterior.
Hablando del exterior, temas como el de Guyana y la posición del Gobierno busca crear unidad ante un problema que involucra la soberanía nacional.
El presidente Maduro también ha manifestado estar abierto a las políticas de Joe Biden. Y se puede ver, con la reciente medida del Departamento del Tesoro de permitir operaciones en los puertos, que la nueva administración de los Estados Unidos, busca revisar algunas de las sanciones.
En economía hay mucho que hacer, pero ya ha comenzado y la reducción del encaje legal es un gran paso. Aunque debería ser mucho más bajo.
La posibilidad de abrir cuentas en dólares y que los venezolanos con acceso a divisas puedan manejarlas a través de los bancos, también es positivo.
El problema de la gasolina y el combustible en general también debe ser resuelto en poco tiempo. Sabemos de la llegada de dos cargamentos de gasolina de Irán que van a resolver el tema de la escasez y las colas.
Pero, aún queda por solventar el problema del gas y el diésel. No obstante, con la disposición a escuchar a los expertos, también esperamos que se llegue a un acuerdo. Por el bien del país.