La Unión Europea ha evitado este miércoles pronunciarse sobre el estatus en el que queda el líder opositor venezolano Juan Guaidó, hasta ahora presidente de la Asamblea Nacional y autoproclamado ‘presidente encargado’ de Venezuela, y ha dejado en manos de los estados miembro su reconocimiento en el cargo.
Tras expirar el mandato de Guaidó al frente de la Asamblea Nacional este martes, el bloque europeo ha señalado su intención de trabajar con él y otros dirigentes venezolanos para lograr una salida pacífica a la crisis política en Venezuela, aunque ha eludido pronunciarse sobre su puesto.
En un comunicado el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha asegurado que la UE mantendrá su contactos «con todos los actores políticos y de la sociedad civil para devolver la democracia a Venezuela, incluido en particular Juan Guaidó y otros representantes de la Asamblea Nacional saliente».
La UE reivindica la Asamblea Nacional elegida en 2015 como la última expresión libre de los venezolanos en un proceso electoral, aunque evita expresamente apoyar la extensión del mandato de Guaidó.
Fuentes europeas han precisado que son los estados miembro quienes reconocen a mandatarios y que el comunicado se limita a comentar la formación de la nueva Asamblea Nacional. En la actualidad 25 países de la UE, todos menos Italia y Chipre, reconocen a Guaidó como presidente interino algo que, explican en Bruselas, no ha cambiado por el momento.
Mientras, por parte de España, que defiende una «posición consensuada» en la UE sobre el nuevo escenario que se abre en Venezuela, se han remitido a la declaración del Alto Representante y no se prevé una declaración este miércoles.
CRITICA EL MANDATO DE LA ACTUAL ASAMBLEA
En el comunicado de Borrell, la UE lamenta «profundamente» que la Asamblea Nacional haya asumido su mandato este martes tras unos comicios que no fueron democráticos. Asimismo, ha reiterado su apuesta por un diálogo nacional inclusivo que permita una salida política a la crisis en Venezuela que pasa por la celebración de elecciones locales, legislativas y presidenciales.
En diciembre los Veintisiete decidieron no reconocer el resultado de las elecciones legislativas en Venezuela al considerar que no cumplieron los estándares internacionales «mínimos» y se dieron un mes de plazo para definir su relación con la Asamblea Nacional.
En este sentido la UE llama a las autoridades venezolanas y sus líderes a «priorizar los intereses del pueblo venezolano y unirse para empezar una transición liderada por venezolanos que pueda permitir una salida pacífica, inclusiva y sostenible a la crisis».
Igualmente, el Alto Representante reitera la obligación de garantizar plenamente el respeto y la protección de los Derechos Humanos en Venezuela e indica que la UE estará especialmente alerta ante cualquier acto de represión, en particular contra miembros de la oposición.