La posible candidatura de María Corina Machado, líder de Vente Venezuela, está generando agitación tanto en las filas del chavismo como en la oposición, ya que su presencia agita las aguas de la contienda primaria que determinará quién enfrentará a Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales de 2024.
Con información de El Nacional
Las tensiones aumentan Una fuente cercana a la Plataforma Unitaria Democrática, que incluye a los partidos AD, PJ, VP y UNT, reveló que existe un nerviosismo palpable debido a la fuerza de la candidatura de María Corina Machado. Según esta fuente, su liderazgo en las encuestas con un 32,88% de intención de voto, según Meganálisis, está generando preocupaciones en los demás aspirantes a la primaria, que no logran superar individualmente el 5% de apoyo.
La cuestión del consenso La posibilidad de un consenso entre los factores opositores se mantiene en juego, especialmente considerando las inhabilitaciones políticas que pesan sobre figuras como Henrique Capriles, Freddy Superlano y la propia María Corina Machado. Aunque un consenso podría ser difícil de alcanzar, algunos expertos ven esta opción como necesaria, dadas las amenazas que rodean el proceso primario, incluida la posibilidad de prohibiciones judiciales o adelantos de elecciones sugeridos por Nicolás Maduro.
¿Una división catastrófica? El politólogo Fernando Spiritto argumenta que dejar fuera a María Corina Machado de un consenso tendría consecuencias catastróficas en términos electorales. La división en las filas opositoras podría llevar a la desmovilización de su base, lo que otorgaría ventaja al gobierno, que cuenta con un núcleo duro de votantes. Spiritto enfatiza que la mayoría de la población se encuentra en la oposición, pero la falta de un liderazgo claro y la división podrían favorecer al gobierno.
El desafío para el chavismo María Corina Machado también representa una amenaza para el chavismo. La Contraloría General de la República extendió su inhabilitación política a 15 años, lo que muestra la preocupación del chavismo ante su candidatura. Para Spiritto, el gobierno de Maduro ve en Machado una candidata fuerte que podría movilizar a un sector de la población que pondría en riesgo su posición.
El cálculo político Spiritto sugiere que el gobierno está dispuesto a asumir el costo político de la inhabilitación de Machado para evitar enfrentarla como candidata. En lugar de competir contra un candidato fuerte, el gobierno buscaría habilitar a alguien más afín a su causa para asegurarse elecciones «medianamente competitivas» y un triunfo electoral más «merecido».
La eventualidad de las elecciones de 2024 en Venezuela se presenta cargada de incertidumbre y decisiones políticas cruciales, ya que los actores de ambos lados luchan por posicionarse en un contexto de desafíos y oportunidades únicos.