En una entrevista con EFE, María Corina Machado, precandidata presidencial venezolana, aseguró que tiene todas las de ganar en las primarias opositoras del 22 de octubre. Machado compite con otros 12 aspirantes para enfrentarse al chavismo en las elecciones presidenciales de 2024. A pesar de reconocer la asimetría en recursos y la censura en los medios locales como desventajas, confía en superar estos obstáculos en su camino hacia las presidenciales.
Machado se presenta como la opción de la oposición para un liderazgo renovado y legítimo que pueda representar a Venezuela. Su objetivo es alcanzar un futuro vibrante y luminoso para el país, que lleva gobernado por el chavismo durante 24 años. Al preguntarle si algo la haría desistir de participar en las primarias, Machado afirmó que tiene la partida ganada y no se deja intimidar.
La líder de Vente Venezuela, considerado el primer partido liberal del país, rechaza cualquier cambio en la fecha de las primarias propuesto por el Consejo Nacional Electoral (CNE). Aunque aceptaría apoyos del ente electoral para aumentar el número de centros de votación, Machado insiste en que la fecha no debe cambiarse. Destaca el trabajo de la Comisión Nacional de Primarias (CNP) en la planificación de las elecciones y afirma que será un ejercicio maravilloso a pesar de las extremas condiciones impuestas por la tiranía.
Machado se muestra segura de superar la inhabilitación de 15 años impuesta por la Contraloría para competir en cargos de elección popular. Considera esta medida como un obstáculo político y está lista para enfrentarlo con determinación. Destaca la importancia de un proceso de negociación firme y claro para superar la inhabilitación y asegurar una posición de fuerza real para el antichavismo a través de las primarias.
Además de ser la primera mujer en gobernar Venezuela, Machado también busca establecer un Gobierno liberal en el país. Es recordada por su enfrentamiento con Hugo Chávez en el Parlamento en 2012, cuando le dijo que «expropiar es robar». Machado afirma que hoy no se trata solo de ella confrontando al chavismo, sino de todo un país representado en su candidatura.
Machado insiste en que no subestima a la tiranía del Gobierno de Nicolás Maduro y reconoce que Venezuela vive un momento peligroso en el que los derechos de muchos están siendo vulnerados. Sin embargo, confía en la creación de un movimiento social poderoso y bien organizado, que alinee los intereses de todos, dentro y fuera del país, para lograr una transición ordenada y pacífica.
La precandidata enfatiza que sus ideas y valores siguen siendo los mismos, pero reconoce haber experimentado una transformación a lo largo de los años. A pesar de las acusaciones en su contra, Machado confía en el potencial creador, la bondad y la honestidad de los venezolanos.