Durmiendo en la calle, en plazas y aceras, así se encuentra buena parte de los venezolanos que logran cruzar la Frontera Sur e ingresan por Texas y Arizona a Estados Unidos. Hacen una travesía de mes y medio de recorrido pasando la selva del Darién, seis países de Centroamérica y México.
Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.-
Según denuncian expertos en migración y ONG humanitarias del país norteamericano, los venezolanos que se encuentran en situación de calle llegan en condiciones de extrema vulnerabilidad, sin ropa, sin pasaporte, con problemas de salud y sin apoyo de familiares o conocidos que les brinden un techo. Autoridades de Texas, Washington DC, Nueva York, Chicago y Florida han registrado el colapso de sus refugios por el desborde de migrantes que han recibido este año.
Según datos de Marisela Castillo, directora de la ONG Humanitaria Action, desde abril hasta septiembre de este año el gobernador de Texas, Greg Abbott, que es del partido Republicano, ha enviado a 9.400 venezolanos a Washington DC. En medio de una pugna política con los demócratas que protestan al presidente, Joe Biden, por permitir el acceso masivo de migrantes de más de 100 nacionalidades desde 2021.
«Los venezolanos que están llegando a Estados Unidos son sobrevivientes de la selva del Darién, de seis países de Centroamérica y de México. Esta última nación es donde más peligro corren porque son víctimas de extorsiones, secuestros y de redes de coyotes. Llegan muy cansados, altamente afectados, rotos. Hay mujeres y niñas que han sido víctimas de violaciones sexuales masivas de tres a siete hombres. Y los venezolanos hombres llegan con estrés postraumático», relató.
Esta ONG ha reportado que la mayoría de los venezolanos que han enviado a Washington DC en los últimos meses son hombres, cuya edad promedio es de 30 años y suelen ser los más vulnerables porque sólo tienen acceso a refugio los que llegan en familia y las mujeres embarazadas.
«Hemos analizado que el 55% de estos hombres venezolanos que terminan en la calle tienen como grado de estudio el bachillerato y un 35% apenas cursó el sexto grado en Venezuela. A diferencia de los de otras nacionalidades, como los cubanos, haitianos, los venezolanos no tienen redes de apoyo en EE. UU., personas que previamente hayan migrado y los puedan ayudar. A esa complicación se le suma que los mandan a ciudades de habla inglesa, idioma que no dominan y que les dificulta conseguir trabajo», refirió.
Patricia Andrade es abogada y fundadora de la organización Raíces Venezolanas en Miami, presta asesoría legal y ayuda a emigrantes, comunicó que a diario recibe una llamada de venezolanos que reportan estar en situación de calle y que necesitan asistencia humanitaria.
«En Estados Unidos no hay albergues para inmigrantes, los albergues que existen son para personas que están en situación de calle, normalmente que han perdido el empleo, que tienen una adicción. Lo que ha ocurrido en el último año es que el presidente, Joe Biden; la vicepresidente, Kamala Harris y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas han jurado proteger las fronteras de EE. UU., pero han violado ese juramento, incentivando la migración ilegal en una forma irresponsable, porque dejan que todo el mundo entre por la Frontera Sur y luego la gente no tiene en dónde estar», exclamó.
Afirma que el gobernador de Texas es el que ha recibido el mayor flujo de inmigrantes, y en vista que no cuenta con los funcionarios de inmigración suficiente y que su estado no tiene las infraestructuras para atender a todas las nacionalidades que llevan de manera ilegal y en extrema pobreza, además que ha agotado todas las instancias para pedir ayuda económica, ha decidido enviar a esa avalancha de inmigrantes, la mayoría venezolanos, a ciudades como Texas, Washington DC, Nueva York y Chicago.
El caso más reciente se registró ayer jueves, cuando 100 venezolanos fueron enviados en autobús a la residencia de la vicepresidenta, Kamala Harris en Washington DC. El miércoles 14 de septiembre el gobernador de Florida, Ron DeSantis, también republicano, envió en dos aviones a 50 migrantes hasta Martha’s Vineyard, una isla frente a la costa de Massachusetts donde viven personas adineradas, como acción de protesta.
Andrade comentó que los procedentes de nuestro país que logran tener acceso a un refugio reciben abrigo, alimentos y techo por tres días máximo. «Son personas que requieren una ducha, comida, atención médica y muchos americanos lo que están pidiendo es que los deporten, porque esa ayuda que reciben salen de los impuestos que pagan. El gobernador de Texas no puede hacer nada porque la frontera es abierta, es un río y no tiene apoyo», exclamó.
Sostiene que otra de las quejas que tienen los norteamericanos es que han cesado los controles para investigar a los inmigrantes. «En este país para tramitar una visa te piden hasta el ADN, cuentas bancarias, pero a los inmigrantes los dejan pasar, a todos, no hay un filtro para saber si viene con un prontuario delictivo en su país de origen», denunció.
Desinformados
Según explicó Cioly Zambrano, magistrada del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en el exilio, uno de los grandes problemas que ocurre con la población venezolana es que están desinformados de cuál será su situación legal una vez cruzan la Frontera Sur.
«Muchas personas se vienen a los EE. UU. pensando que acá los van a proteger, les van a otorgar vivienda, comida, ropa y el sistema estadounidense no funciona así. Ese es un error que ha venido creciendo en la población vulnerable, porque en sus países de origen les venden la idea de que EE. UU. solucionará sus problemas y es falso», apuntó.
La abogada venezolana, Cioly Zambrano, explica que la mayoría de los venezolanos que llegan ilegalmente a EE. UU., desconoce que está cometiendo un delito.
«En este país hay un sistema bastante complicado para una persona que pasa por la frontera sin tener una visa. Ya el sólo hecho de pasar una frontera sin estar autorizado significa un delito civil, si lo hace por primera vez. Si lo hace la segunda vez es un delito federal», explicó.
Los inmigrantes deben enfrentar un proceso judicial para que un juez les otorgue un alivio migratorio. «La gente no lo sabe, piensa, yo salgo y yo voy a salir a trabajar. No, en este país no se puede trabajar si no se está autorizado debidamente y para eso hay que tener un trámite migratorio activo», precisó.
En el Darién
Inés Urdaneta, vicepresidenta de la ONG Alianza Venezolana en Costa Rica, indicó que los venezolanos que logran ingresar a EE. UU. son sobrevivientes del Darién. Una selva en donde se interna en promedio de 10 a 12 días para pasar el primer tapón que les permita acceder después a siete países: Panamá, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y México.
«En agosto pasaron 1000 personas en promedio por el Darién diariamente, 14% fueron niños. Es un problema para los países por los que tienen que transitar porque no tiene capacidad para contener y controlar la migración. Tampoco hay capacidad económica. Médicos Sin Frontera y Acnur tienen campamentos de asistencia humanitaria, pero no son suficientes», informó.
Indicó que el 53% de los migrantes venezolanos que han atravesado el Darién lo hacen sin acceso a alimento, 45% no cuenta con un techo en el trayecto dónde refugiarse y 38% no tiene medios para cubrir gastos de transporte.
Sufren violaciones sexuales
Carlos Rodríguez, abogado del Centro de Derechos Humanos de la UCAB, comunicó que Médicos Sin Frontera informó que unas 400 migrantes venezolanas han sido víctimas de violaciones sexuales en el Darién desde abril del año 2021 hasta ahora.
«Los riesgos a los que se exponen los venezolanos son robos, agresiones, asesinatos y abusos sexuales. Este año ha habido 120 venezolanos víctimas de abuso sexual», alertó.
Sostiene que los sobrevivientes han reportado una cantidad de migrantes desaparecidos. «Algunos venezolanos han sido abandonados por sus guías en zonas peligrosas, facilitando la condiciones para que sean asaltados. Hay otros que abandonan a sus familiares dentro de la selva porque fallecen o no tienen que seguir caminando. Las labores de rescate son muy difíciles, sólo se hacen en caso de emergencia o en puntos de rescate específicos por vía aérea», detalló.
Los venezolanos comenzaron a aumentar el flujo por esta selva desde enero 2022, cuando México comenzó a solicitar visa.
Sólo dos países brindan ayuda
Inés Urdaneta, de la ONG Alianza Venezolana en Costa Rica, indicó que luego de cruzar el Darién, los venezolanos sólo reciben asistencia humanitaria en Panamá y Costa Rica, esto países lo hacen para que puedan seguir su trayecto hacia Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala, naciones donde pasan un trago amargo porque no tienen políticas de protección al inmigrante y les complican su paso por la frontera, solicitándoles visas o salvoconductos que superan los 150 dólares por persona.
«México es el país más violento porque ahí los migrantes se encuentran con bandas criminales, son expuestos a droga, prostitución», exclamó Urdaneta.
Extienden renovación de TPS
La jurista, Cioly Zambrano, indicó que el 8 se septiembre el gobierno de Estados Unidos anunció la extensión en las fechas para que los venezolanos puedan volver a registrarse para el Estatus de Protección Temporal (TPS en inglés) y también renovar sus Documentos de Autorización de Empleo.
Según Los Ángeles Times, 423 mil venezolanos han solicitado TPS desde 2020, pero sólo un grupo lo ha recibido. Zambrano estima que el 45%. «Este proceso ha sido lento porque el sistema de migración de EE. UU. se vio afectado por la pandemia y por la migración masiva que recibe», apuntó.