El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró este martes, tras un ataque con más de un centenar de misiles desde Irán, que la república islámica «cometió un gran error esta noche, y pagará por ello».
El mensaje de Netanyahu, al comienzo de una reunión del Gobierno, son sus primeras declaraciones desde que Irán lanzase unos 180 misiles contra el país, obligando a millones de personas a buscar refugio.
Por su parte, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, el general Herzi Halevi, ha aseverado que se responderá a Irán por su ofensiva de este martes con un ataque que demuestre las capacidades «precisas y sorprendentes» de las Fuerzas Armadas del país.
«Elegiremos cuándo cobrar el precio y demostraremos nuestras precisas y sorprendentes capacidades de ataque de acuerdo con las directrices de la cúpula política», ha manifestado Halevi en declaraciones recogidas por las FDI en sus redes sociales.
Asimismo, el jefe del Estado Mayor de las FDI ha destacado que Israel ha demostrado su capacidad para «impedir que el enemigo logre un objetivo» gracias a «un comportamiento civil ejemplar y un sistema de defensa aérea muy fuerte».
Por su parte, el portavoz de las FDI, Daniel Hagari, ha denunciado que el ataque iraní es «una escalada grave y peligrosa» que «tendrá consecuencias». Sin embargo, al igual que Halevi, ha dicho que será la cúpula política quien decida «cuándo, dónde y cómo» responder.
«Nuestras capacidades defensivas y ofensivas están al más alto nivel de preparación. Nuestros planes de acción están listos», ha señalado Hagari, que asegura que Irán y sus socios «buscan destruir el Estado de Israel» y el Ejército tratará de evitarlo.
El portavoz militar israelí ha informado de que el ataque iraní ha consistido en el lanzamiento de algo más de 180 misiles balísticos que, en algunos casos, ha impactado en el centro y sur del país, pero que en la mayoría de los casos han sido derribados por Israel y la «coalición defensiva liderada por Estados Unidos».
Irán ha lanzado este martes una oleada de misiles contra Israel como respuesta a la muerte del líder político de Hamás, Ismail Haniye, a finales de julio en un ataque en Teherán; y la del máximo responsable de Hezbolá, Hasán Nasralá, el viernes en Beirut.