El economista y director de Ecoanalítica Luis Oliveros, aseguró que la producción petrolera en el país llegó a niveles donde tiene el inventario lleno, pero no tiene a quien venderle, por lo que su producción baja debido a las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump.
Oliveros afirmó en entrevista con Circuito Éxitos, que las sanciones han producido daños colaterales que han afectado la producción de combustible en el país, “Venezuela no le puede vender petróleo ni comprar gasolina a quien quiera, no es lo mismo que te mande EE.UU. barcos de gasolina a que te lo mande Irán, eso involucra mayor tiempo y mayores costos”.
“Venezuela tiene sus inventarios repletos, llega momentos en los que tiene que bajar su producción porque no tiene a quién venderle”, afirmó el economista quien destacó que en 2019 Venezuela cerró el 2019 con una producción de 800-900 mil barriles cuando ahora cierra con una caída del 50%, cubriendo a duras penas, los 500 mil barriles.
Estas sanciones han hecho que Venezuela, al no quedarse de brazos cruzados, se juntara con países en la misma situación de sanciones, quienes le enseñaron cómo sortear la situación, resalta Oliveros.
“Hoy tenemos la certeza que la industria petrolera no está generando recursos suficientes, parece que no va a mejorar en el corto mediano plazo” expresó el directivo quien proyectó un panorama de principios de 2021 similar a este último trimestre de 2020.
“El sistema refinador venezolano entró en caos, la situación de colas llegó a Caracas, estamos viviendo una situación incómoda de combustible, hay escasez de combustible (…) ahora parece que las colas son en la mayoría de las estaciones, la gente apenas se entera que alguna refinería tiene problemas, sale corriendo a echar gasolina”.
Por otra parte, Oliveros afirma que el consumo de gasolina y diésel es un tema complejo, pues no hay cifras oficiales que reflejen el nivel de producción, “se sabe que las refinerías no trabajan a capacidad, ciertamente Venezuela depende de la importación de combustible como nunca en su historia (…) pasamos de ser un país que importaba gasolina a uno que se alegra por que le suplan gasolina”.
El diésel es importante para el transporte de carga y producción de alimentos, los tractores y plantas se mueven con diésel, «si no llega diésel importado, se proyecta escasez para la primera parte del año», añadió.