El papa Francisco ha hecho un llamado a la liberación de todos los rehenes tomados por militantes de Hamás y ha expresado su profunda preocupación por el asedio que Israel está imponiendo a Gaza. En sus comentarios más enérgicos hasta la fecha sobre el conflicto en Gaza, el papa Francisco ha afirmado que Israel tiene el derecho de defenderse.
Durante su audiencia general semanal en la Plaza de San Pedro, el papa Francisco habló con voz sombría y dijo: «Sigo con dolor y aprensión lo que está sucediendo en Israel y Palestina. Tantas personas han perdido la vida y otras han resultado heridas. Rezo por las familias que han pasado de celebrar un día festivo a vivir un día de luto, y pido la liberación inmediata de los rehenes».
El papa Francisco también expresó su preocupación por el asedio total que los palestinos están enfrentando en Gaza y señaló que ha habido muchas víctimas inocentes. Sin embargo, también reconoció el derecho de defensa de aquellos que están siendo atacados.
El sábado pasado, militantes de Hamás desde la Franja de Gaza atacaron partes del sur de Israel, en lo que se ha convertido en el ataque palestino más mortífero en la historia de Israel. Según el ejército israelí, el número de muertos en Israel ha llegado a 1.200 y más de 2.700 personas han resultado heridas.
La mención del derecho de Israel a la autodefensa por parte del papa Francisco se produce después de la presión diplomática ejercida por Israel para que hiciera tal declaración. El embajador de Israel ante el Vaticano, Raphael Schutz, manifestó su deseo de escuchar palabras más contundentes sobre el derecho de Israel a defenderse.
En sus comentarios, el papa Francisco destacó que el terrorismo y el extremismo no son soluciones para el conflicto entre israelíes y palestinos, sino que alimentan el odio, la violencia y la venganza, causando sufrimiento a ambas partes. Además, hizo hincapié en la importancia de la paz en Oriente Medio, una paz basada en la justicia, el diálogo y el valor de ser fraternos.
El Ministerio de Salud de Gaza ha informado que al menos 950 personas han perdido la vida y 5.000 han resultado heridas en el superpoblado enclave costero.
El papa Francisco ha hecho un llamado a la paz en la región y ha instado a que se construya sobre la base de la justicia, el diálogo y el coraje de ser hermanos.