Imágenes difundidas por la agencia de noticias AFP muestran el carácter dictatorial del régimen cubano.
Fuerzas antimotines y jóvenes armados con palos recorren algunas zonas de La Habana como respuesta del gobierno a las protestas pacíficas que tienen lugar desde el domingo en al menos 60 puntos diferentes de la geografía cubana.
Imágenes difundidas por la agencia de noticias AFP y compartida por cientos de ususarios en redes sociales muestran el carácter dictatorial del régimen cubano.
Las instantáneas corresponden al fotorreportero Yomil Lage y muestran a un grupo de antimotines, con armas blancas, escudos de protección y tonfas caminando por calles de la capital.
Las fotos sirvieron para que algunos internautas alertaran de la intervención militar que representa el despliegue de estos efectivos en Cuba, como medida de coerción contra la población que se manifestó en contra del Partido Comunista y el gobierno de Miguel Díaz-Canel.
Con el acceso a internet por datos móviles casi inaccesible y sin que la prensa oficialista y acreditada en La Habana de cuentas reales de lo que sucede en las calles del país, es difícil tener una visión más global del problema, y aún así salen videos y testimonios desde la isla que dan fe de la masacre que se comete contra la sociedad cubana.
Reportes independientes aseguran de la toma de calles y espacios públicos por parte de efectivos militares, así como de simpatizantes del régimen armados con palos que tienen la orden de reprimir cualquier contestación contraria a la dictadura.
En conferencia de prensa, Díaz-Canel dio luz verde a la represión a manos de los «revolucionarios comunistas», medida que le generó críticas por parte de la sociedad civil independiente, gobiernos de algunos países y organizaciones internacionales.
Tras justificar que el descontento popular de los cubanos es causa de las medidas económicas adoptadas por Estados Unidos contra la dictadura castrista y repetir el discurso triunfalista que caracteriza a los políticos cubanos, el actual presidente de la isla recibió reproches por parte del exilio, que a su vez convocó a un paro nacional en estos días.
Testigos de la represión en La Habana calificaron de inhumano lo que sucedió y criticaron a las autoridades del orden por permitir la violencia entre cubanos y ser cómplices con la represión, que incluso pudiera haberle costado la vida a algunas personas, según testimonios de familiares.