El ministro del Interior y Seguridad de Corea del Sur, Lee Sang-min, presentó su dimisión este domingo, en medio de la crisis política desencadenada por la fallida declaración de ley marcial realizada esta semana por el presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol.
Por Infobae
La decisión de Lee se dio a conocer a través de un comunicado un día después de que el Partido Democrático (DP, por sus siglas en inglés), el principal grupo opositor, propusiera una moción de destitución en su contra, cuya votación en la Asamblea Nacional está programada para el próximo martes.
El ministro, considerado uno de los colaboradores más cercanos de Yoon, defendió al mandatario durante una sesión del comité parlamentario celebrada tras el levantamiento de la ley marcial.
Según afirmó, la decisión presidencial de implementar la medida excepcional “se llevó a cabo siguiendo el proceso y la normativa constitucional”.
La trayectoria de Lee ha estado marcada por controversias previas. En febrero de 2023, fue suspendido de su cargo después de que la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, aprobara una moción de destitución en su contra, tras la trágica estampida ocurrida en octubre de 2022 durante las celebraciones de Halloween en el barrio de Itaewon, Seúl, que dejó más de 150 muertos.
No obstante, en julio de 2023, el Tribunal Constitucional anuló por unanimidad la moción de destitución y ordenó la restitución inmediata de Lee como ministro del Interior.
La dimisión del funcionario llega en un momento de intensa tensión política, en el que la administración de Yoon enfrenta crecientes críticas por su manejo de crisis y la percepción de inestabilidad en el gobierno.
Detuvieron al ex ministro de Defensa de Corea del Sur
Según la agencia Yonhap, el ex ministro de Defensa de Corea del Sur, Kim Yong-hyun, fue detenido este domingo por la mañana por su presunta implicación en la reciente declaración de la ley marcial.
Este arresto tuvo lugar pocas horas después de que el Parlamento no lograra destituir al presidente Yoon Suk Yeol debido al boicot del oficialista Partido del Poder Popular, cuyos miembros, salvo dos, abandonaron la Cámara.
Como resultado, la moción solo recibió el respaldo de 195 de los 300 asambleístas, insuficiente para validar la votación.
La controversia se desató tras la fallida orden del presidente Yoon, que desencadenó una crisis política en el país. A raíz de esto, Kim Yong-hyun presentó su renuncia el martes, pero su participación en los hechos llevó a la Policía a abrir una investigación contra él y contra el mandatario.
Los cargos incluyen presunta insurrección y la orden de impedir el acceso de legisladores a la Asamblea Nacional. “La declaración de la ley marcial es una acción con implicaciones legales serias y se procederá a revisar los cargos presentados”, declaró un oficial de la Policía.