Con retrasos en algunos centros electorales, El Salvador inició este domingo una jornada electoral en la que se prevé la reelección del presidente Nayib Bukele, quien cuenta con una arrolladora popularidad gracias a su política de “mano dura” contra las pandillas.
Mucho antes de que abrieran los centros de votación a las 7:00 hora local, como estaba previsto, los salvadoreños hacían filas para participar en estas elecciones “históricas” en la que reina la paz y tranquilidad en las calles, tras años de terror y zozobra sembrado por grupos pandilleros.
Para este proceso electoral, el primero bajo un estado de excepción desde que se puso fin a la guerra civil en 1992 con los Acuerdos de Paz de Chapultepec, están convocados a participar 6,2 millones de salvadores, entre ellos 740.000 en el exterior, en un proceso que se extenderá hasta las 17:00 hora local.
“Institucionalmente estamos listos dentro y fuera del país, con todas las condiciones necesarias para recibir al electorado en los centros de votación, en las Juntas Receptoras de Votos para que puedan votar libremente”, expresó la presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSJ), Dora de Barahona.
1.595 centros de votación en El Salvador y 81 en el extranjero para voto tradicional y electrónico fueron habilitados este domingo para un proceso electoral en el que también se renovará el Legislativo reducido a 60 diputados.
¿Cómo votar en EEUU?
Con casi 2,9 millones de salvadoreños viviendo en Estados Unidos, según un informe del Instituto de Políticas Migratorias (MPI, por sus siglas en inglés), al que tuvo acceso la Voz de América, el voto en el país es uno de los más importantes.
Son 740.000 salvadoreños en el exterior los que están convocados para este proceso electoral. Siempre y cuando posea un Documento Único de Identidad (DUI), con un domicilio postal en el territorio estadounidense, podrá ejercer su derecho al voto de manera electrónica a través del portal habilitado desde el 5 de enero hasta las 17:00 hora local de este 4 de febrero.
Los ciudadanos que deseen ejercer el voto electrónico deberán ingresar el número de DUI y de folio, situado en uno de los laterales del carnet. Posteriormente, se tendrá que validar la identidad del elector mediante unas pruebas biométricas, que implican tomarse una foto para que sea comparada con la que aparece en el documento de identidad salvadoreño.
Una vez completado este proceso, el votante será habilitado para ejercer su derecho al sufragio universal vía electrónica, seleccionando a los candidatos a presidente, vicepresidente y diputados.
Una vez seleccionados, aparecerá la casilla “EMITE TU VOTO”, que permite formalizar el voto electrónico desde el exterior.
Voto presencial en EEUU
Aquellos que prefieran participar en el proceso de votación de manera presencial, tendrán que dirigirse a uno de los centros habilitados por la Embajada de El Salvador en el país. En Florida, los salvadoreños podrán ejercer su derecho al sufragio en un punto dispuesto en Doral.
Los demás estados que contarán con centros electorales son:
- Arkansas: Springdale
- Colorado: Aurora
- California: Los Ángeles, San Francisco, Fresno, San Bernardino
- Carolina del Norte: Charlotte
- Illinois: Chicago
- Georgia: Duluth
- Maryland: Silver Spring
- Minnesota: Saint Paul
- Massachusetts: Boston
- Nevada: Las Vegas
- Nueva Jersey: Elizabeth
- Nueva York: Long Island
- Texas: Dallas, Houston, Laredo, San Antonio, El Paso, McAllen
- Virginia: Woodbridge
- Distrito de Columbia: Washington DC
- Washington: Seattle
- Nebraska: Omaha
- Tennessee: Nashville
- Utah: Salt Lake City
- Arizona: Tucson
Nayib Bukele, una victoria asegurada
Nada ni nadie coloca en duda el segundo período presidencial de Nayib Bukele, expublicista de 42 años que goza de una intención del voto de 81,9%, según la última encuesta realizada por la Universidad Centroamericana (UCA).
Hoy se enfrenta a una “oposición desgastada”, cuyos candidatos apenas aparecen en los sondeos de opinión, sin alcanzar siquiera un 10% de respaldo popular, haciendo que la campaña fuera prácticamente de un solo candidato: Bukele.
“Hoy por hoy, el principal adversario del presidente puede ser él mismo. Está compitiendo contra su propio primer gobierno, con su propio antecedente, y eso es lo que va a marcar la naturaleza de esta elección”, dijo en una entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS el periodista y especialista en Comunicación Estratégica, Gabriel Trillos.
Los presidenciales que más se le “aproximan” al mandatario, son el exdiputado Manuel Flores, por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) -izquierda-, con 4,2% de la intención del voto; y el empresario Joel Sánchez, de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) -derecha-, con 3,4%. Los tres contrincantes restantes figuran en los estudios de opinión con menos de 2,5% de apoyo ciudadano.
El inmenso poder de Bukele, cuya candidatura es posible gracias a una resolución de la Sala Constitucional de la Corte Suprema, “aceptada y avalada” por el Tribunal Supremo Electoral, el Congreso -de mayoría oficialista- y la oposición que, pese a las críticas, ha decidido aceptar las “reglas del juego” y legitimar las elecciones con su participación, hace temer la instauración de un “partido hegemónico” en El Salvador.
“Con otros cinco años, tendrá suficiente tiempo para consolidar una dinámica de partido hegemónico”, dijo a la AFP el politólogo Álvaro Artiga, de la UCA.
Tan seguro está de su reelección que el presidente más popular de América Latina, según una encuesta regional, ni siquiera ha pedido el voto para él, sino que invita a sufragar por su partido, Nuevas Ideas, y para no perder escaños en el Congreso y no poner en “riesgo la guerra contra las pandillas”.
Lucha contra las pandillas
Su lucha contra las pandillas le han ganado al mandatario salvadoreño el arrollador nivel de aprobación que acumula, convirtiéndose en su principal ventaja para tener una victoria casi asegurada en las elecciones de este 4 de febrero.
Bajo un régimen de estado de excepción, extendido por vigésima segunda vez a principios de enero y fuertemente cuestionado por opositores y defensores de derechos humanos, Bukele logró una reducción considerable de la tasa de homicidios, que cerró el 2023 en 2,4 por cada 100.000 habitantes, según cifras oficiales.
Pese a las críticas de la oposición y denuncias de violaciones de DDHH, los salvadores han aplaudido su política de “mano dura”, que desde marzo de 2022 restringe algunas libertades ciudadanas.
“Yo tenía que pagar ‘renta’ (extorsión), me dijeron que iban a matar a mi esposa y a mi mamá. Llegaron con pistolas a mi trabajo. Ahora todo ha mejorado”, indicó a la AFP Nelson García, de 39 años, quien tiene una venta de comidas en la capital.
Para el analista Gabriel Trillos, el hecho de que alrededor del 91% de los salvadoreños manifiesten sentirse seguros en sus barrios evidencia la percepción de seguridad que tienen. “Cuando hablan de DDHH recuerdan sus DDHH, que fueron vulnerados muchísimos años por las pandillas. Ahora la percepción y la realidad sobre seguridad ha configurado una nueva imagen país”, indica.
Desafíos económicos
Con una reelección casi segura, Bukele tendrá que enfrentar los desafíos económicos en la nación centroamericana, donde alrededor del 29% de sus ciudadanos son pobres, según la CEPAL.
Mantener la seguridad, mejorar la economía y consolidar el desarrollo social, mediante educación, salud y convivencia, sería los nuevos retos que asumiría el mandatario salvadoreño, aseguran analistas.
En este sentido, las relaciones con Estados Unidos juegan un papel fundamental, al ser un “socio estratégico” y “la segunda casa” de casi tres millones de salvadoreños, aseguró a DIARIO LAS AMÉRICAS Guillermo Gallegos, vicepresidente del Parlamento salvadoreño.
“Estamos reconstruyendo nuestro país, tanto desde la Asamblea como desde la Presidencia. Mejorar la economía, generar empleo, fortalecer la salud y la educación, son los temas principales en los cuales el presidente va a enfocar su próximo mandato”, enfatizó Gallegos.
Con información de Diario Las Américas