El Gobierno en disputa de Venezuela declaró el pasado 7 de abril, que el año académico 2019-2020 terminará con actividades escolares desde casa, usando herramientas virtuales en algunos casos, como una medida preventiva para enfrentar la COVID-19.
Por Alvaro Algarra / voanoticias.com
La decisión ha generado una serie de opiniones encontradas entre los colectivos de educadores y padres, quienes se han manifestado contra la medida y exponen su preocupación por la situación.
Aristóbulo Isturiz, ministro de educación, explicó la visión que el Gobierno en disputa tiene con relación a este tema.
“Lo que suspendemos son las clases presenciales, donde no se agrupe la gente, la gente que se quede en su casa. Todo lo que signifique una plataforma comunicacional, que nos permita a distancia adquirir conocimientos, y el aprendizaje, nosotros lo vamos a utilizar”, dijo el ministro.
De acuerdo con Isturiz esto será mientras continúan las acciones para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
Yésica Salazar una joven madre venezolana, dijo a la Voz de América que llevar a la práctica la estrategia del Gobierno es casi imposible.
“No es lo mismo que esté en la escuela, a que esté metida en la computadora, hay muchos niños que ni saben. No es la misma enseñanza, yo creo que este año está perdido”, señaló.
Otra de las limitaciones que genera preocupación en los padres es el servicio de internet en el país, el cual es considerado de los más lentos en la región y no llega a todo el territorio nacional.
Impedimento que Isabel Beltrán, madre de un escolar, afirma es cierto: “las páginas no actualizan, aquí no funciona internet, aquí los niños aprenderán lo que saben sus padres en casa, lo poco que puedan enseñar, porque realmente didácticos como tal es imposible, no todos somos maestros ni somos profesores”.
Aun así, Beltrán respalda la decisión gubernamental, debido a la situación generada por la pandemia.
De acuerdo con cifras obtenidas de una encuesta reciente del Gobierno en disputa, un total de 90.1% de los venezolanos está de acuerdo en culminar el año escolar desde los hogares.