Al presidente de la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez, le molestó que se hiciera mención a las andanzas del Coqui en el Parlamento de mayoría oficialista, durante la sesión ordinaria de este martes 8 de junio
El Coqui no solo hace lo que quiere en la Cota 905 y zonas cercanas sino que su influjo también se sintió ayer en la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro, donde la mención de sus andanzas dejó desnudos a los diputados rojo rojitos que integran ese Parlamento.
Todo comenzó con una intervención del diputado Luis Augusto Romero, secretario general de Avanzada Progresista, quien solicitó al Parlamento que se ocupara de los problemas concretos de la gente, que no podían seguir haciéndose los locos con lo que ocurría con la delincuencia en Caracas.
Citó los recurrentes tiroteos que se producen en la Cota 905, La Vega y El Paraíso y demandó que las autoridades pongan en cintura a los autores de estos disparos. Agregó que iba a solicitar la comparecencia de la ministra de Relaciones Interiores, almiranta Carmen Meléndez y los directores de las distintas policías.
Las palabras de Romero no causaron la menor simpatía entre los chavistas de la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro. El primero en responder fue el jurisconsulto Pedro Carreño, quien con la enjundia que lo caracteriza aseguró que el gobierno se estaba encargando del tema y que desde la comisión que encabeza, la de Interior y Justicia, se estaban encausando acciones en esa dirección.
La intervención de Carreño no fue suficiente para el presidente de ese Parlamento, Jorge Rodríguez, quien demostró que a veces es mejor quedarse callado cuando no se tiene nada que decir. Es imposible justificar lo que ocurre en la Cota 905 y sus inmediaciones para unos personajes que tienen 21 años en el poder y que han encabezado la alcaldía de Caracas desde el año 2000, Rodríguez fue alcalde de Caracas.
Por lo que recurrieron a algo que ya es habitual en ellos: culpar a la oposición. Resulta que “tienen fotos y videos donde se ve a dirigentes de la oposición financiando” a los malandros. Rodríguez, quien no tiene un pelo de tonto, cree que los demás son tontos. Por cierto, que ese mismo argumento fue repetido pocas horas después por el propio Maduro.
Luego de que este debate los dejara desnudos, los diputados rojo rojitos siguieron con su agenda, y la misma reiteró que les importa muy poco lo que realmente ocurre en el país y padecen sus habitantes. Aprobaron una Ley de Aguas, de la cual lo único que se puede garantizar es que no se va a cumplir, y aprobaron un acuerdo ratificando su compromiso en defensa del ambiente. Sí leyó bien, del ambiente, los mismos que apoyan el Arco Minero del Orinoco. Por cierto, el diputado del Partido Comunista sugirió hacer una sesión en el Arco Minero para constatar la defensa del ambiente del chavismo.
Volviendo al Coqui, Rodríguez advirtió a Romero que luego que el gobierno actuara en la Cota 905 no saliera a defender a los afectados con el argumento de que se les violaron los Derechos Humanos. No hacía falta esa advertencia, todos sabemos que los Derechos Humanos son violados de manera recurrente en el país. Fernando Albán y el capitán Acosta Arévalo, entre muchos otros, dan cuenta de ello.
Para los que crean que lo que hace falta en la Cota 905, La Vega y zonas circunvecinas es mano dura, les recordamos que este año en la parroquia La Vega se produjo una masacre donde más de 20 personas fueron asesinadas por la policía y el hampa sigue mandando en esa zona. Veremos si los anuncios de Rodríguez y Carreño se cumplen. Por ahora, en la Cota 905, La Vega y sus alrededores, el “poder popular” que manda es el del Coqui.