El panorama de la libertad de prensa y el ejercicio del periodismo en Venezuela ha sido objeto de un exhaustivo análisis por parte de la organización no gubernamental Espacio Público en su informe anual de 2023.
En los últimos 20 años, se ha producido el cierre de aproximadamente 408 medios de comunicación en el país, como resultado de un proceso prolongado de restricción de la información y la libertad de prensa. Entre los más afectados se encuentran las emisoras de radio.
Según los datos presentados por Espacio Público, estos cierres han tenido lugar en un contexto en el que la población necesita estar informada, en medio de una compleja crisis humanitaria, una profunda desigualdad y una ola masiva de migración.
En las dos últimas décadas, se han cerrado 285 emisoras de radio a nivel nacional, lo que representa un preocupante 71% de los medios clausurados. Estos cierres han sido ejecutados por la Comisión Nacional de Telecomunicación (CONATEL), en ocasiones con la participación de fuerzas de seguridad. En la mayoría de los casos, se alegó que estas estaciones operaban de manera clandestina, sin cumplir con los requisitos legales establecidos.
Espacio Público también ha destacado la falta de diversidad informativa en Venezuela, especialmente en estados como Falcón, donde de las 36 estaciones de radio en funcionamiento, 29 solo transmiten música y contenidos afines al gobierno.
La situación se agrava aún más en 13 estados del país donde no existen medios de comunicación independientes después de los cierres. Entre estos se encuentran Amazonas, Apure, Aragua, Barinas, Cojedes, Delta Amacuro, Falcón, Guárico, Mérida, Monagas, Portuguesa, Sucre y Trujillo.
Según el observatorio, la crisis económica, el bloqueo de internet y la presión gubernamental para silenciar las voces disidentes han agravado aún más la situación.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) ha denunciado en repetidas ocasiones la «censura a la prensa independiente» en Venezuela y ha instado a la comunidad internacional a mantenerse alerta ante las violaciones a la libertad de expresión por parte de un gobierno que atropella los derechos de sus ciudadanos.
En resumen, la libertad de prensa y el ejercicio del periodismo en Venezuela han sufrido un grave deterioro en las últimas décadas, con el cierre de cientos de medios de comunicación y la falta de diversidad informativa en varios estados del país. Esta situación se ha visto agravada por la crisis económica, el bloqueo a internet y la represión gubernamental contra las voces disidentes. Es crucial que la comunidad internacional esté al tanto de estas violaciones a la libertad de expresión y tome medidas para proteger los derechos de los ciudadanos venezolanos.