Vestidos con trajes de bioseguridad y abordando un avión de la Fuerza Aérea, los primeros 100 migrantes, la mayoría venezolanos, que llegaron a la frontera norte de Chile fueron deportados la mañana de este miércoles.
Así lo reseña Monitoreamos, que destaca al ministro de Defensa de ese país, Baldo Prokurica, quien aseguró que se trata de personas que “no respetan las normas de nuestro país, lo hacen por ingresos ilegales, sin visas”.
De acuerdo con el funcionario, “no hay ningún país del mundo que abra sus fronteras y genere un problema para quienes llegan engañados por traficantes de inmigrantes y por expectativas que no se cumplen, que pueden terminar dañando a nuestra gente, a nuestro país con una sobrecarga en el sistema sanitario y en el sistema económico”.
Y remató: “No somos capaces de soportar una inmigración ilegal y abultada”.
Desde temprano en la mañana han corrido imágenes de quienes fueron expulsados de ese país por haber entrado ilegalmente a Chile. El vuelo, de acuerdo con los canales nacionales, salió con destino a Colombia y Venezuela.
Ayer se informó que Chile deportaría a un grupo de 100 migrantes que ingresaron al país por un paso irregular en la frontera con Bolivia, una zona que vive una crisis migratoria sin precedentes.
“Mañana (hoy) sale un vuelo desde Iquique con más de 100 personas que en su mayoría van a ser expulsadas por haber ingresado de manera ilegal por pasos no habilitados y están de manera irregular en el país”, indicó el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.
Tal situación generó reacciones del gobierno interino. Julio Borges, comisionado para Exteriores de Juan Guaidó, criticó la decisión y afirmó que la solución no era deportar, sino “multiplicar esfuerzos” para sacar a Nicolás Maduro de Miraflores.
Así lo dijo: “La decisión del gobierno chileno de deportar a un grupo de venezolanos no es cónsona con la conducta asumida por los gobiernos democráticos venezolanos que recibieron a centenares de chilenos que huían de las dictaduras más brutales y que hicieron de nuestro país su segunda patria”.