Durante las tres primeras semanas de enero, la ola de frío ártico en Estados Unidos se cobró la vida de 67 personas, que murieron por accidentes viales o hipotermia. Gran parte del país terminó la semana mortificado por una tormenta que llegó incluso a Texas y Florida, dos ciudades acostumbradas al clima cálido. Aunque las condiciones climáticas no serán tan intensas, se espera que una nueva masa de aire helado afecte varias regiones y como resultado haya temperaturas bajo cero, precipitaciones abundantes y posibles nevadas. Este fenómeno podría representar el último impacto del invierno severo antes de unas semanas con condiciones más suaves hacia finales de mes.
Cuadrillas de obreros en Memphis, Tennessee, trabajaron las 24 horas el domingo para detectar y arreglar tuberías rotas que habían hecho bajar la presión del agua en la ciudad. Algunos habitantes llevan días sin agua, y se les pidió a los 400.000 clientes de la empresa hervir el agua antes de usarla.
El CEO de la empresa Memphis Light, Gas and Water, Doug McGowen, dijo en un video en las redes sociales el sábado que espera tener el domingo en la tarde un estimado de cuándo será restablecida la presión del agua. “Aguanten un poco y ayúdense entre vecinos”, pidió McGowen. Para el sábado a la tarde, la empresa había arreglado 36 fuentes de agua y más de 2.000 filtraciones en viviendas y negocios. De todas maneras, se prevé que habrá más rupturas.
La Universidad Rhodes College, en Memphis, empezó el sábado a pedirle a algunos alumnos a que regresen a sus casas y a trasladar a otros a hoteles. “Les pedimos que por favor no vengan al campus esos días debido a la situación con el agua y los peligros que ello causa”, dice el anuncio de la institución educativa. “Dejaron de funcionar las griferías, y nos dijeron que no usáramos los baños y tampoco funcionaban bien las duchas”, relató uno de los estudiantes, Sam Roth, quien optó por regresar a su casa familiar en Nashville en vez de quedarse en un hotel.
Memphis es el sistema de agua más grande, aunque no el único en Tennessee que sufrió problemas con sus tuberías de agua debido al clima inusualmente frío.
La lluvia helada, el aguanieve y los fuertes vientos harán particularmente difícil el traslado en partes de Kansas y Oklahoma, indicó el Servicio Meteorológico Nacional. La sensación térmica en Iowa será de -7°C .
Pero las temperaturas gélidas, que empezaron el viernes, podrían ceder un poco en los próximos días. Por ejemplo en Des Moines, la capital de Iowa, se prevén temperaturas por encima de cero a partir del lunes. “Al no llegar más aire ártico desde Canadá, se prevé un calentamiento para el centro de Estados Unidos”, indicó la agencia meteorológica.
En el oeste del estado de Nueva York se preveían temperaturas de unos -7°C y vientos de 16 kph, además de posibles nevadas. Cayeron casi 60 centímetros de nieve en esa área la semana pasada.
“Cuídense donde estén en los próximos días mientras la región comienza a descongelarse; los pedazos de hielo que se desprenderán cuando suban las temperaturas implican un gran peligro”, dijo la agencia meteorológica.
Con información de El Nacional