El fenómeno que ocurre con la moneda estadounidense es el resultado de la inyección de bolívares a la economía mediante el petro y los paliativos del régimen de Nicolás Maduro por mantener la tasa de cambio controlada, explicó Luis Oliveros, economista y profesor universitario
Por Didiana Patricia Archila / @DPArchila / El Nacional
El fenómeno que acabamos de ver con el dólar es el resultado de la inyección de bolívares a la economía mediante el petro y los paliativos del régimen de Nicolás Maduro por mantener la tasa de cambio controlada.
Así lo aseguró Luis Oliveros, economista y profesor universitario, en declaraciones a El Nacional.
¿Por qué subió el dólar paralelo tan vertiginosamente?
Oliveros indicó que como la gente entiende que la moneda nacional es débil, en cuanto el régimen le manda un bono, lo usa para comprar divisas o bienes. La consecuencia es una circulación mayor de bolívares.
«No hay interés en tener petros o bolívares. La gente quiere tener bienes o dólares. Cuando ese dinero le llega, sale a gastarlo rápidamente, eso genera presión sobre el dólar y este sube«, dijo.
Afirmó que el petro, al final, son bolívares que encubren una inyección de dinero a la economía. Funciona como un bono de deuda o un título de deuda para que los venezolanos lo liquiden.
¿Por qué volvió a bajar?
La venta controlada de divisas mediante la banca puede respaldar en cierta medida la cotización paralela, afirmó el economista.
«El régimen a partir de este martes, debido a que el lunes fue bancario, comenzó a vender dólares a la banca. Comenzó de nuevo la política de restricción de liquidez a la banca. Sucede que al vender dólares por esta vía, mantienes recepción de liquidez en bolívares por esa venta y eso hizo que el dólar se devolviera», justificó.
¿Qué tan sostenible es esta medida en el tiempo?
Oliveros negó que se pueda precisar cuánto tiempo será funcional esta medida debido a la hiperinflación que vive el país.
Recordó que la economía venezolana hace 10 años demandaba 100 millones de dólares al día y actualmente, presume, no debe demandar ni 20% ni 25% de aquello.
Sin embargo, el profesor destacó la influencia que el Banco Central puede ejercer. «En una economía en la que el BCV interviene, incluso con montos bajos, puede generar disminuciones importantes en la tasa de cambio porque, además, tiene el encaje legal de la banca que genera problemas de liquidez», señaló.
¿Qué se debe esperar?
«Que la divisa suba o baje dependerá de la intención del régimen de inyectar más o menos dólares en la economía», declaró.
Resaltó el hecho de que la tendencia es siempre al alza, aunque haya «estabilidad» en la cotización por algunos días.
Oliveros alertó sobre la posibilidad de que se repitan estos episodios de volatilidad. «Mientras no se tenga desde la administración central una política coherente, creíble, que disminuya realmente el valor de la inflación para que la gente sienta confianza nuevamente en el bolívar, vamos a seguir viendo comportamientos volátiles cuando den bonos«, advirtió.
Aseveró que entre paliar la recesión y la hiperinflación, el régimen eligió la hiperinflación. «Mientras en economías normales se pueden elegir ambos aquí se eligió solo uno porque la idea no es generar bienestar. Es una decisión de sobrevivencia», concluyó.