Es cierto que un grupo de personas bailaron al ritmo de Jerusalema, la canción de moda, en un cola a la espera de surtir sus vehículos de gasolina, en Caracas, como lo muestran varias cuentas en redes sociales y se ha compartido por Whatsapp
Por: Ligia Perdomo /Tal Cual
El 13 de noviembre se viralizó un video en el que un grupo de personas bailan en plena calle, Jerusalema, tema popularizado por el productor de discos sudafricano Master KG y la vocalista sudafricana Nomcebo y que a mediados de 2020 se convirtió en un cántico de esperanza contra la pandemia de covid-19, que hasta el 24 de noviembre ha provocado más de 59,6 millones de contagios y 1,4 millones de fallecidos en todo el mundo.
La cuenta en Instagram Farándula de Venezuela publicó el video y pidió comentarios. Como es costumbre, hubo opiniones favorables y otras en contra del comportamiento exhibido por un grupo de personas, al bailar Jerusalema (Jerusalema Challenge) en una calle de Caracas, mientras sus vehículos permanecían en una larga cola para poder abastecerse de gasolina.
Se observan filas de carros a ambos lados de una calle en la que se desarrolla la coreografía. El video se encuentra también en Facebook, compartido entre otros, por medios de comunicación como Diario NotiFalcón y en Twitter por distintos usuarios.
Al hacer la búsqueda en Twitter para dar con el usuario que publicó primero el material audiovisual, apareció un tuit de la periodista venezolana Beatriz Adrián, quien conversó con Luis Alberto Albarracín, protagonista del video y quien dirigió el acto.
Albarracín dice que el audiovisual «retrata una realidad que vivimos, pero también la forma en que muchos de los venezolanos que estamos aquí, trabajando día a día y luchando día a día, tratamos de sobrellevar esta situación».
Director de Caracas Dance Company, Albarracín comentó a Adrián que conoció a quienes aparecen en el video, en la cola para surtir sus vehículos de gasolina, un bien que en los años más recientes escasea en un país petrolero hoy venido a menos.
Desde que comenzó la cuarentena a mediados de marzo por la aparición de la covid-19, la espera para abastecer las unidades de transporte se multiplicaron ante la poca gasolina disponible en el país, por lo que el régimen de Nicolás Maduro recurre a gasolina iraní para paliar el colapso de la producción nacional.
El estrés, la ansiedad embargan a los venezolanos que pasan varias horas del día, e incluso pernoctan en sus carros, en colas para poder llegar a la estación de gasolina cumpliendo el esquema pico y placa.