¡YA NADIE ESTÁ A SALVO!: El estremecedor mensaje de la ONU sobre la crisis climática

0
384

Ninguna región, ninguna población, ningún mar en la Tierra está ya a salvo de los daños que actualmente provoca el cambio climático. La subida del nivel del mar, las olas de calor, sequías y tormentas “sin precedentes en siglos” están “inequívocamente” asociadas a las actividades humanas que causan el calentamiento global, según la última evaluación científica del Panel Internacional de Expertos, el IPCC.

RAÚL REJÓN // EL DIARIO.ES

Este informe, “basado en la física”, debe servir, en teoría, para orientar las políticas climáticas. El grupo de 240 científicos de 66 países ha comprobado que la alteración del clima que ha provocado la humanidad ha alcanzado tal inercia que “la temperatura global continuará incrementándose hasta la mitad del siglo XXI” y que el objetivo del Acuerdo de París de contener ese recalentamiento en 2 o 1,5ºC se sobrepasará este siglo “al menos que se hagan profundas reducciones en la emisión de CO2 y otros gases invernadero en las próximas décadas”. Este trabajo es un encargo de los gobiernos inscritos en la ONU para ofrecer la mejor evidencia científica sobre el estado y la modificación del clima.

Uno de los redactores del informe, el director ejecutivo de Carbon Project, Pep Canadell, resume para elDiario.es: “Nadie está a salvo. Hemos comprobado que el calentamiento y la acidificación de los océanos ha llegado ya a más de 2.000 metros de profundidad”. Y añade que “no hay duda de que el calentamiento acumulado hasta ahora es debido a las actividades humanas. Eso no lo había dicho así de taxativamente nunca el IPCC”. El informe expone que “la influencia humana ha alterado el clima a un ritmo sin precedente en los últimos 2.000 años”.

Y, a medida que el clima cambia, “experimentaremos episodios sin precedente en cuanto a su magnitud, frecuencia, periodo y localización”, es decir, más grandes, más habituales y en momentos y lugares donde antes no se producían.

Canadell destaca que este documento “pasa de lo abstracto a lo tangible, A lo que afecta directamente a las personas”. Las sequías que empeoran las cosechas, las tormentas que provocan inundaciones, las olas de calor que matan a millares de personas y ceban súper incendios forestales en épocas y latitudes casi inimaginables.

Prácticamente todas las regiones geográficas en las que la ONU divide el mapamundi han visto cómo el calor extremo ha empeorado y la relación de este cambio con las actividades humanas. 41 de 45 regiones están en la zona roja. La región mediterránea en la que está España ha empeorado y con la máxima probabilidad científica de que se deba al calentamiento inducido por los humanos.

También 19 regiones mundiales padecen mayores precipitaciones torrenciales (en este caso el Mediterráneo que abarca desde España a Turquía muestra un acuerdo bajo sobre el tipo de cambio que afecta). Ninguna región ha decrecido en este riesgo y faltan datos en otras 18.

Respecto a las sequías, agrícolas y ecológicas, el análisis explica que hay poco acuerdo o pocos datos para 32 regiones. Del resto, todas menos una muestran peor panorama que hace 15 años. Entre las que han incrementado sus sequías y con mayor probabilidad de que este fenómeno esté exacerbado por la “contribución humana”, aparece la región mediterránea.

Aunque la crisis climática es un fenómeno planetario, impacta de manera diferente en función de la zona del mundo que se observe. En la región mediterránea, los científicos han constatado el incremento de las sequías y prevén un aumento de la aridez y las condiciones para los incendios con un calentamiento de 2ºC (aceptado por el Acuerdo de París). Hay alta certeza de que España deba prepararse para una combinación nefasta de “temperaturas extremas, descenso de precipitaciones, mayor aridez, pérdida de nieve y subida media y máxima del nivel del mar”.

Lee la nota completa en EL DIARIO.ES