El segundo al mando de chavismo, Diosdado Cabello, señaló que “cualquier desviación de la línea revolucionaria” debe ser condenada, repudiada por los militantes del PSUV; a lo que agregó que entrarán en una profunda revisión
La reciente detención de los alcaldes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) inmiscuidos en actividades ilícitas, ha marcado el distanciamiento de altos funcionarios del régimen chavista de dichos eventos.
El pasado 27 de enero la alcaldesa recién electa del municipio Jesús María Semprún del estado Zulia, Keyrineth Fernández, fue detenida por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana en el estado Falcón por tener en su poder unas seis panelas de presunta droga, que se traducen en unos 7,1 kilogramos.
Fernández, quien viajaba en compañía de una diputada según informaciones extraoficiales, fue detenida en la población de Cumarebo, en el municipio Zamora de Falcón. Se transportaba en una camioneta Toyota Tacoma, vehículo en el que se encontró el alijo identificado con la marca “Timberland” y la escritura 404 “de Colombia para el Mundo”.
En este operativo también resultaron apresados los diputados Taina González (JPsuv-Zulia) y Luis Viloria Chirino (Primero Venezuela-Táchira); no se ha especificado si este último es el mismo que en noviembre del año pasado fue detenido en el estado Vargas por el mismo delito de posesión de drogas.
Por su parte, en la mañana del sábado 29, el vicepresidente Sectorial de Economía, Tareck El Aissami informó a través de un comunicado que habían logrado desmantelar a los cabecillas de una red dedicada al desvío y contrabando de gasolina en el estado Anzoátegui, operativo en el cual fue detenido el alcalde del municipio Independencia, Carlos Rafael Vidal, junto al fiscal superior del estado Bolívar, Manuel Gil Da Silva.
En este sentido, el segundo al mando de chavismo, Diosdado Cabello, señaló que “cualquier desviación de la línea revolucionaria” debe ser condenada, repudiada por los militantes del PSUV; a lo que agregó que entrarán en una profunda revisión.
“En el PSUV no hay compromisos con delincuentes, invito a la vigilancia permanente de la gestión, del comportamiento de cualquier funcionario, debemos ser absolutamente intolerantes con los corruptos, con los burócratas, con los delincuentes, sea quien sea (…) Quien incurra en hechos delictivos, llámese como se llame le caerá todo el peso de la ley”, expresó.
Cabello agregó que desde el régimen se seguirá avanzando en la lucha contra la corrupción y la delincuencia organizada. “El PSUV se pone al frente de las investigaciones necesarias, no puede haber corruptos que se vistan de Chavistas, si ud. tiene un cargo y es corrupto vamos por ud. llámese como se llame”.
El diputado de la Asamblea Nacional adepta al régimen de Nicolás Maduro Mario Silva refrendó los comentarios del también parlamentario Diosdado Cabello, a lo que añadió que la “revolución se respeta”.
“Me importa un carajo la campaña sucia que hagan. La Revolución se respeta y se respeta el enorme esfuerzo del Presidente Nicolás Maduro. Nadie que cometa un delito podrá llamarse revolucionario y mucho menos chavista. Ahora ladren lo que quieran, lacayos”, escribió en su cuenta de la red social Twitter.
En la misma línea, el fiscal general designado por la ilegítima y extinta asamblea constituyente, Tarek William Saab, señaló que las acciones para desarticular tramas de contrabando y corrupción “están siendo coordinadas por el gobernante venezolano Nicolás Maduro” en conjunto con el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami y el Ministerio Público.
Asimismo, indicó que las personas detenidas serán imputadas por “Terrorismo, Contrabando Agravado, Peculado Doloso, Corrupción Propia Agravada y Asociación”.
“Ratificamos la voluntad del Ministerio Público de hacer justicia en nombre de la Constitución y la Ley en contra de cualquier acción que atente contra los intereses de la Patria y el pueblo”, expresó.
Hasta el momento, el gobernante venezolano Nicolás Maduro, no ha emitido comentario alguno sobre la detención de ambos alcaldes, miembros de su organización política.