¿QUÉ PASÓ EN LAS TEJERÍAS? Experto en riesgos de la ULA lo explica

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Según José Carrero Marquina, geomorfólogo de la Universidad de Los Andes, la construcción desmedida cerca del cauce de la quebrada Los Patos, y la alteración del curso del agua fueron factores que incidieron en el deslave de Las Tejerías. Destacó que el río reclamó su cauce y arrasó con todo

Katherine Dona – TalCual

Para José Carrero Marquina, geomorfólogo y geógrafo de la Universidad de Los Andes, se combinaron varios factores para que se desarrollara el deslave que causó la tragedia en Las Tejerías. La construcción de viviendas y galpones cerca del abanico fluvial del cauce de la quebrada Los Patos, así como los diques laterales para redireccionarlo, fueron desbordados por las fuertes lluvias que arrasaron con edificaciones en esta localidad aragüeña, el pasado sábado 8 de octubre.

El deslave en la zona, ubicada a unos 70 kilómetros de Caracas, dejó un balance de 36 fallecidos, 56 desaparecidos y unas 800 viviendas afectadas (400 de pérdida total y 400 con daños parciales).

Carrero Marquina, experto en ocupación de zonas de riesgo, usó las imágenes de satélite para explicar el desastre natural en Las Tejerías. Descubrió que todos estos factores provocaron que se formara el alud que arrasó con viviendas, empresas y personas que se encontraban a su paso, que es su canal creado de forma natural.

La quebrada Los Patos es una microcuenca, dijo Carrero, quien explicó que al ser pequeña reduce su afluente durante las temporadas de verano, algo que fue aprovechado por personas que construyeron en la zona de su abanico fluvial, que es el área por donde se extiende este cauce.

“Los habitantes dicen que había llovido muy poco y que de pronto se vino mucha agua desde la parte alta de la quebrada, lo que indica que llovió fuertemente en las cabeceras”, detalló el geógrafo.

Según el ministro de Interior, Justicia y Paz, Remigio Ceballos, durante los últimos días se registraron récords pluviométricos en la zona afectada comparables con un mes. “Tuvimos grandes volúmenes de agua cayendo, 108 litros por metro cuadrado”, destacó la autoridad de interior.

La tormenta perfecta
Esta quebrada se divide en tres cuencas: alta, media y baja, dijo el especialista. Además, indicó que de la parte alta viene un solo canal que es el que desciende por la ladera (se denomina canal de escorrentía).

“En la parte más baja del canal de escorrentía estaba y está instalado el ser humano con una densidad de población muy desordenada en toda la orilla de la quebrada”, dijo el también profesor de la ULA.

Además, Carrero Marquina añadió que efectivamente a la quebrada Los Patos se le unió otra subcuenca, con lo cual sus niveles de agua aumentaron y formaron un solo canal. Mientras esta corriente atravesaba la montaña el cauce era controlado por las rocas y las formas de esta estructura natural que evita que amplíe o que se vaya para alguno de los lados.

“Cuando esas quebradas dejan esas montañas, que son las que las controlan, entonces desparraman sus sedimentos”, señaló el experto que también analizó los derrumbes que se registraron en Tovar, estado Mérida, en agosto del año pasado.

El pueblo se construyó sin planificación
Destacó que es normal que en las épocas de verano el cauce del río se reduzca y corra una cantidad de agua menor e incluso parezca un pequeño canal.

“La gente cree que ese canalito no va a crecer en época de lluvia”, dijo Carrero, quien también destacó que estas lluvias fueron excepcionales porque los volúmenes de agua fueron mayores.

“La montaña fue depositando sedimentos a manera de un abanico, que geomorfológicamente se llama cono de eyección o abanico fluvial, que es donde está el cuerpo del pueblo de Las Tejerías. Todo el pueblo fue construido sobre esta área. Por eso, cuando llegó ahí arrasó con casas, industrias y las personas que se encontraban allí”.

El ser humano se metió en el canal de escorrentía, por eso el río creció de manera exorbitante y empezó a tomar sus terrenos donde hace años pobladores construyeron”, resaltó.

Asimismo, explicó que los diques laterales que se construyeron en el camino de la quebrada también perjudicaron el desplazamiento del río porque no se tomaron en consideración la estructura original del río, sino que en algunos casos fue desviado a conveniencia de las personas que se instalaron en las adyacencias de la quebrada para tener mayor espacio.

Carrero alertó que esta situación se puede repetir en cualquier espacio venezolano que reúna las mismas condiciones, es decir, que los pobladores hayan construído cerca del cauce de una quebrada o río, sin tomar en consideración el camino natural del mismo, datos que existen desde el año 1936.

Finalmente, llamó a la población a tomar conciencia de los riesgos que corren al vivir tan cerca de afluentes fluviales y les recomendó mudarse con familiares durante lo que queda de las temporadas de lluvias.