Un niño aficionado de los Astros de Houston presente en el estadio LoanDepot Park, sede de los Marlins de Miami, vivió un momento de felicidad plena este lunes gracias al gesto inesperado de su ídolo José Altuve.
El pequeño se encontraba entre un grupo de fanáticos que aguardaban en las tribunas por un autógrafo del gran pelotero tras la derrota 5-1 de los Astros ante el equipo local.
Ya cuando se marchaba apresuradamente, luego de firmar varios pelotas, el camarero que ayer fue seleccionado Jugador de la Semana de la Liga Americana optó por quitarse la camiseta con su número 27 y entregársela al niño, quien ante la gran sorpresa no encontraba cómo reaccionar.
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La escena, con el joven dando gritos de felicidad mientras miraba a todos a su alrededor y terminando en un llanto, se volvió viral rápidamente en las redes sociales. Una vivencia inolvidable.
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