La semana pasada, un feroz incendio arrasó la comunidad costera de Lahaina en Maui, mientras las sirenas exteriores permanecían en silencio. El director de la Agencia de Manejo de Emergencias de la isla, Herman Andaya, tomó la decisión de no activar el sistema de sirenas para alertar a los residentes, lo que generó controversia y críticas por parte de la comunidad.
Andaya explicó que su temor era que al activar las sirenas, las personas se dirigieran hacia el fuego en lugar de alejarse de él. Sin embargo, esta decisión, sumada a la escasez de agua que dificultó el trabajo de los bomberos y al colapso del tráfico en una carretera donde las llamas alcanzaron a los vehículos que huían, ha sido duramente cuestionada después del incendio más mortal registrado en Estados Unidos en más de un siglo, con un saldo de al menos 111 víctimas mortales.
El jueves, un día después de su declaración, Andaya renunció a su cargo por motivos de salud no especificados. El alcalde Richard Bissen aceptó su renuncia de inmediato y anunció que se buscará un reemplazo lo antes posible.
La falta de activación de las sirenas se ha revelado como un posible error en medio de una serie de problemas de comunicación que agravaron el caos durante el incendio. Hawaii cuenta con lo que se considera el mayor sistema exterior de sirenas de emergencia del mundo, creado después de un tsunami que dejó más de 150 muertos en 1946.
Ante las críticas y la necesidad de una evaluación imparcial, la fiscal general de Hawaii, Anne López, anunció que una organización externa realizará una investigación para evaluar la respuesta del gobierno y determinar cualquier acción correctiva necesaria. Se espera que esta investigación demore varios meses.
Mientras tanto, los residentes desplazados continúan siendo alojados en hoteles hasta la próxima primavera. Se espera que los albergues estén vacíos a principios de la próxima semana y se ofrecerán habitaciones de hotel a aquellos que han pasado los últimos días durmiendo en sus autos o acampados en estacionamientos.
La búsqueda de personas desaparecidas se ha extendido más allá de Lahaina, abarcando otras comunidades afectadas por el incendio. Hasta el momento, los rescatistas solo han cubierto el 45% del área quemada, según informó el gobernador.
En resumen, el incendio en Lahaina ha dejado una gran tragedia y ha generado críticas hacia el director de la Agencia de Manejo de Emergencias por no haber activado el sistema de sirenas. Las autoridades trabajarán en una investigación para evaluar la respuesta del gobierno y tomar medidas correctivas si es necesario. Mientras tanto, los residentes desplazados continúan siendo alojados en hoteles y la búsqueda de desaparecidos sigue en curso.