Mientras el gobierno de Caracas acusa a la Plataforma Unitaria de violar los acuerdos firmados en Barbados al intentar boicotear el referendo, la oposición hace un llamado a que la población analice libremente las preguntas formuladas en la consulta. La Plataforma Unitaria de la oposición venezolana instó a los ciudadanos a tomar decisiones libres y conscientes respecto a las preguntas planteadas en el referendo consultivo sobre la defensa del Esequibo, programado para el 3 de diciembre.
En un comunicado emitido el lunes, la oposición exhortó a los venezolanos a ejercer su libre albedrío y evaluar las cuestiones planteadas en esta consulta. Este pronunciamiento se produce un día antes de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) inicie audiencias públicas sobre la disputa territorial entre Venezuela y Guyana, después de que Guyana solicitó medidas provisionales en contra del referendo consultivo. La presentación de los argumentos orales por parte de Guyana está programada para el martes, mientras que Venezuela lo hará el miércoles.
El presidente Nicolás Maduro recientemente acusó a la oposición de incumplir los acuerdos firmados en Barbados y de supuestamente difundir panfletos y hacer llamados para no votar en el referendo consultivo sobre el Esequibo, un territorio disputado por Venezuela y Guyana. Recientemente, representantes del gobierno de Maduro y de la Plataforma Unitaria de la oposición firmaron dos acuerdos parciales en Barbados, uno sobre la promoción de los derechos políticos y garantías electorales para todos y otro sobre la protección de los intereses vitales de la nación.
Este último ratifica los derechos históricos, soberanos e inalienables de Venezuela sobre el territorio del Esequibo y rechaza las acciones de Guyana que van en contra del derecho internacional, relacionadas con la concesión de exploración y explotación de energía en áreas marítimas y submarinas que aún no se han delimitado. En el referendo consultivo, Venezuela consultará a sus ciudadanos, entre otras cosas, si están a favor de anexar la Guyana Esequiba, un territorio en disputa de aproximadamente 160.000 kilómetros cuadrados, como un estado y agregarlo al mapa territorial de Venezuela, y si reconocen la jurisdicción de la CIJ para resolver la controversia territorial. Esta última pregunta es una de las más controvertidas, según los expertos en asuntos internacionales, quienes advierten que podría tener implicaciones legales, ya que el gobierno podría decidir no continuar con el proceso en la CIJ argumentando el apoyo popular que podría recibir en la consulta.
El 30 de octubre, Guyana presentó una solicitud de medidas provisionales, argumentando que Venezuela no debería celebrar el referendo hasta que la CIJ se pronuncie sobre los temas de fondo para determinar si el Laudo Arbitral de 1899 es válido. La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, quien viajó a La Haya para participar en las audiencias, ha calificado recientemente la solicitud de Guyana como una «barbaridad» y ha acusado al gobierno de ese país de violar la Carta de las Naciones Unidas y el orden internacional.
Tanto el gobierno como la oposición coinciden en que el Esequibo es territorio venezolano, que el Laudo Arbitral es nulo y reconocen el Acuerdo de Ginebra de 1966 como el único instrumento jurídico aplicable para alcanzar una solución práctica y satisfactoria para ambas partes. Sin embargo, la oposición insiste en que Venezuela cuenta con fundamentos sólidos para defender su territorio, los cuales deben ser presentados ante la CIJ.
En un comunicado, la Plataforma Unitaria expresó su deseo de que se realice una revisión integral y estratégica de la defensa de los derechos de Venezuela. Además, lamentó que la situación actual de la defensa de los derechos sea consecuencia de una política exterior irresponsable que se ha llevado a cabo durante más de 20 años. Recientemente, el presidente de Guyana, Irfaan Ali, viajó al Esequibo y afirmó que el territorio les pertenece y que no cederán ni un centímetro. La histórica controversia entre Venezuela y Guyana por el territorio del Esequibo, una zona rica en recursos naturales, se ha intensificado en las últimas semanas, después de que el gobierno de Maduro rechazara una licitación petrolera realizada por Guyana, argumentando que las áreas costeras están en disputa y que las empresas a las que se les adjudique no tendrían derechos para explorarlas.
En 1966 se firmó el Acuerdo de Ginebra para resolver el conflicto de soberanía, después de que Venezuela considerara nulo e inválido el Laudo Arbitral de París de 1899, que cedió el territorio a Gran Bretaña, que en ese momento tenía a Guyana como colonia.
En 2018, Guyana se presentó unilateralmente ante la CIJ, el principal órgano judicial de las Naciones Unidas, para solicitar una resolución del conflicto. Dos años después, en 2020, la CIJ se declaró competente para examinar la disputa fronteriza que Venezuela y Guyana mantienen desde hace más de 100 años sobre el territorio del Esequibo, lo cual ha sido objetado por Venezuela, que considera que el Acuerdo de Ginebra es el mecanismo adecuado para resolver la controversia territorial.
El Estado venezolano afirma que no reconoce a la CIJ como un medio válido para resolver la controversia y reafirma que el Acuerdo de Ginebra es el único instrumento válido para resolverla. Los expertos siguen recomendando al Estado que prepare una sólida defensa que desmantele el Laudo Arbitral de París y recuerdan que si la Corte falla a favor de Guyana, la sentencia será inapelable.