El gobierno de Chile anunció el miércoles que implementará una estrategia de expulsión de migrantes irregulares utilizando aviones, ya sean civiles o de la Fuerza Aérea, con destinos hacia Venezuela, Colombia y República Dominicana. Esta medida forma parte de los esfuerzos del gobierno de Gabriel Boric para abordar la grave crisis de inseguridad que enfrenta el país sudamericano.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, informó que se destinarán 1.400 millones de pesos (1,6 millones de dólares) para llevar a cabo estas expulsiones. Estos recursos permitirán contratar vuelos comerciales hacia Venezuela y, en un tercer caso, posiblemente hacia República Dominicana o Colombia. Hasta el momento, Chile ha realizado 240 expulsiones en lo que va del año, pero se espera que este número aumente significativamente.
Además, Estados Unidos ha modificado recientemente las sanciones impuestas al Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (CONVIASA), lo que facilitará la repatriación de migrantes venezolanos a través de esta aerolínea. Esta medida también contribuirá al proceso de expulsión de ciudadanos venezolanos que se encuentran en situación irregular en Chile.
La mayoría de los migrantes irregulares que han llegado a Chile en los últimos años son de origen venezolano, por lo que representan una parte importante de los expulsados. El gobierno tiene como objetivo expulsar a 1.000 personas este año y a más de 2.000 en 2024. Sin embargo, se estima que hay alrededor de 12.000 expulsiones decretadas entre 2013 y 2022 que aún no se han llevado a cabo.
La crisis de seguridad en Chile ha alcanzado niveles alarmantes, según la ministra Tohá. En los últimos días, se han reportado varios incidentes violentos, como el ataque a una policía con una granada lanzada por ciudadanos venezolanos, el descubrimiento de un hombre descuartizado en una playa y la muerte de un chileno que fue quemado dentro de su vehículo. Estos incidentes han generado preocupación y han llevado al gobierno a fortalecer los mecanismos de expulsión de migrantes indocumentados involucrados en actividades delictivas.
El presidente Boric ha expresado su preocupación por el aumento de la violencia en el país y ha tomado medidas para abordar esta situación. La estrategia de utilizar aviones para la expulsión de migrantes irregulares es una de las acciones implementadas para proteger la seguridad y el bienestar de los ciudadanos chilenos.
Con información de Voz de América