Provea denunció que los hostigamientos contra la sociedad civil han aumentado

0
409

La organización no gubernamental Provea ha denunciado el incremento en el número de ataques, hostigamientos y amenazas dirigidas hacia la sociedad civil en Venezuela. Esta declaración surge como respuesta a los señalamientos realizados por Nicolás Maduro en contra de Rocío San Miguel, presidenta de Control Ciudadano.

Durante un mitin, Maduro calificó a San Miguel, defensora de derechos humanos, como una «vende patria» y «antipatria», afirmando que lo único que tiene de venezolana es su lugar de nacimiento. Estos comentarios surgieron después de que San Miguel expresara su opinión sobre la situación legal de la nación ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en relación con el referendo consultivo sobre el Esequibo.

Ante esta situación, Provea expresó su solidaridad con San Miguel a través de un comunicado en sus redes sociales, destacando la importancia de no normalizar la persecución y la necesidad de proteger la libertad de expresión.

Además, la ONG recordó un incidente reciente en el que Marino Alvarado, coordinador legal y defensor de derechos humanos, fue víctima de hostigamiento por parte del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Los funcionarios intentaron ingresar a un taller de derechos laborales dirigido a líderes sindicales de Yaracuy.

También se señaló que el pasado 25 de noviembre, agentes policiales, algunos de ellos vestidos de civil, se presentaron en el Segundo Encuentro Nacional de Líderes Sociales por el Derecho al Agua y los Derechos Humanos, organizado por varias instituciones, incluyendo Provea, Unidos por el Agua y el Observatorio de Ecología Política de Venezuela en Barquisimeto, estado Lara.

Por último, Provea hizo hincapié en las denuncias realizadas por la Misión de la ONU sobre el país, que ha advertido sobre una política que busca censurar y criminalizar a las voces disidentes, incluyendo a opositores, periodistas y otros miembros de la sociedad civil. La organización subrayó la gravedad de que el aparato estatal opresivo continúe operando y adaptándose a estas tácticas.