El ex presidente de Uruguay y reconocido líder de la izquierda sudamericana, José «Pepe» Mujica, ha expresado su desaprobación hacia los insultos de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, dirigidos al actual jefe de Estado uruguayo, Luis Lacalle Pou. En sus declaraciones, Mujica criticó el gobierno «autoritario» de Venezuela y lamentó la situación en la que se encuentra el país.
Mujica señaló que Venezuela ha sido afectada por su abundante reserva de petróleo y se ha sentido acorralada, lo que ha llevado a un gobierno autoritario que ha sobrepasado los límites. Sin embargo, también destacó que en una situación de cerco como la que enfrenta Venezuela, cualquier persona con una opinión discrepante es considerada un traidor.
Las declaraciones de Rodríguez, en las que exigió a Lacalle Pou que se ocupara de los problemas del pueblo uruguayo y lo calificó como un «lacayo» de los «amos del norte», fueron duramente criticadas por Mujica. El ex presidente uruguayo enfatizó que no se puede hablar de los presidentes de América de esa manera, ya que es inapropiado tanto por conveniencia como por relaciones diplomáticas.
Lacalle Pou, por su parte, previamente había denunciado la existencia de una «dictadura» en Venezuela. Ante esto, Mujica reflexionó sobre el concepto de dictadura y su origen en el Imperio Romano, donde un solo individuo concentraba todo el poder y no se permitía la discrepancia. Aunque reconoció que el gobierno venezolano puede ser considerado autoritario e incluso dictatorial, enfatizó que es importante llamar las cosas por su nombre.
En resumen, José Mujica ha expresado su desaprobación hacia los insultos de la vicepresidenta venezolana a su homólogo uruguayo, y ha criticado el gobierno autoritario de Venezuela. Además, ha reflexionado sobre el concepto de dictadura y ha afirmado que, aunque se pueda considerar así al gobierno venezolano, es importante utilizar los términos adecuados.