En un evento celebrado recientemente en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro sorprendió a muchos al participar en un ritual evangélico en el que pidió que se levantaran las sanciones impuestas contra su país. El rezo fue dirigido por el obispo Ronaldo Santos, de la Iglesia Universal, y contó con la presencia de Maduro y su esposa, Cilia Flores.
Durante el ritual, Santos expresó su confianza en que, a pesar de las sanciones y bloqueos internacionales, el cielo seguirá bendiciendo a Venezuela. Pidió a Dios que derribara cualquier obstáculo que impidiera el progreso del país. Maduro y su esposa, vestidos de blanco, siguieron en silencio el rezo del pastor, tomados de la mano.
El presidente venezolano aprovechó la ocasión para agradecer a los más de 17.000 pastores presentes por sus oraciones y bendiciones. Se mostró emocionado y reconoció el apoyo que ha recibido de la comunidad evangélica. Según informes de medios locales, se garantizará la protección social de los representantes de las iglesias evangélicas a través de los programas implementados por el gobierno. Estos programas, conocidos como «Iglesia Social», se centran en brindar apoyo a los más necesitados a través de casas de alimentación, donaciones y ayudas sociales a través del «Sistema Patria».
En un gesto adicional hacia la comunidad evangélica, Maduro ordenó la instalación de una mesa técnica encabezada por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones y el Movimiento Evangélico Cristiano de Venezuela. El objetivo de esta mesa técnica es facilitar el acceso de la comunidad cristiana a la radiodifusión sin ningún tipo de burocracia o demora.
Maduro ha destacado en varias ocasiones la importancia de los valores cristianos en la educación y ha enfatizado que estos valores han contribuido a la unión y la paz en el país. El evento contó con la presencia de la esposa de Maduro, Cilia Flores, el gobernador Rafael Lacava y uno de los hijos del presidente, el diputado Nicolás Maduro Guerra.
En resumen, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se unió a un ritual evangélico para pedir que se levanten las sanciones impuestas contra su país. Este gesto fue parte de un evento en el que se anunció la incorporación de 20.000 nuevos pastores evangélicos al programa de protección social del gobierno. Maduro agradeció a los pastores por sus oraciones y prometió facilitar el acceso de la comunidad cristiana a la radiodifusión.