El comerciante Qiqiang Wu, de 34 años, fue víctima de un trágico asesinato durante un intento de robo en la ciudad de Tucupita, estado de Delta Amacuro. Acompañado por un trabajador, Wu fue atacado por delincuentes armados el pasado 8 de abril, quienes buscaban apoderarse del dinero que había ganado durante su jornada laboral.
La policía inició rápidamente la investigación y logró detener a cinco individuos presuntamente implicados en el crimen: Jesús Jiménez, de 33 años; Ray Molero, de 28 años; Jorge Guerrero, de 52 años; Liomar Zacarías, de 37 años; y Luis Bello, de 33 años. Aún quedan dos personas por capturar, conocidas con los alias de Liky y Nene, quienes también participaron en el asalto.
Según las investigaciones, los delincuentes habían estado vigilando el local de Wu desde tempranas horas y se coordinaron con otros cómplices para planear el momento oportuno en el que saldría con el dinero para realizar un depósito bancario.
Los agresores, vestidos con prendas policiales y armados, interceptaron a Wu en su vehículo y amenazaron de muerte a él y a su acompañante. Sin embargo, el comerciante asiático se resistió, lo que desencadenó un tiroteo por parte de los criminales.
Después de cometer el crimen, los asaltantes huyeron en un vehículo Hyundai Accent, conducido por Julio César Pildain, quien aún está prófugo. Como resultado de la investigación, se logró recuperar los vehículos utilizados durante el crimen, así como las prendas usadas por los delincuentes y los teléfonos celulares involucrados en el caso.
Aunque parte del dinero robado se distribuyó entre los implicados, las autoridades continúan trabajando arduamente para identificar y capturar al resto de los responsables. Este trágico incidente pone de manifiesto la importancia de fortalecer la seguridad y combatir la delincuencia en la región.